El dragón que nunca encontré

Por fin te encuentro... papá...

-Mira, ponme un zumo de naranja- Lucy ya estaba animada de mañana.

-Enseguida- la albina sacó un zumo de la mini nevera que tienen debajo del mostrador y se lo dio a la maga celestial.

-Gracias, me estaba muriendo de sed- toma un trago- ¡Ahh...! que bueno... ¿mhh?- mira a un lado- ¿qué te pasa? Hoy estás muy pensativo- el Dragón de Fuego llevaba un buen rato pensando.

-Nada, solo es que me ha parecido escuchar un voz conocida cuando venía hacia aquí...- mira a la rubia- ¿Tu no has escuchado nada cuando venías?-

-No...¿Por?- se queda con la duda.

-Por nada...- sigue a lo suyo.

-¡Oye! Te he hecho una pregunta- insistió en obtener una respuesta, que que para ella un "Nada..." es algo.

-Te he dicho que nada, y si es nada, es nada ¿Vale?- se levantó y salió del gremio a buscar esa voz.

-··Natsu...··- esa voz de nuevo.

-¿quién eres?-

-··Oh... vamos... ¿no me reconoces?··- volvió a preguntar la vos, algo era seguro, la voz procedía de un adulto.

-No, ¿Acaso tendría que saberlo?-

-··En teoría si, pero si no te acuerdas, no te culpo, ha pasado mucho tiempo, te veo en la parte trasera del bosque Oeste dentro de 2 horas, no faltes··-.

-¡Espera un momento! ¡Dime tu nombre al menos!-

-··Si vienes, lo verás tu mismo, y recordarás...··- dicho esto, por mucho que le llamase, no contestaba, en esto Natsu decidió volver a su casa hasta que llegara la hora de la "cita", pero todos sabemos como es Natsu, no podría quedarse sentado horas, así que volvió al gremio.

-¡Ya estoy de vuelta!- abrió las puertas como de costumbre, golpeándolo todo.

-¡Ah! Hola Natsu, ¿Ya has regresado?- pregunta Erza mientras le pega su último bocado a su preciado pastelde fresas- *Te echaré de menos pastel preciado...*- pensó pasa ella misma con cascadas de lágrimas en los ojos por la "pérdida" de su pastel.

-¿Estás llorando?- preguntó Natsu.

-No- se frena en seco de sus sentimientos.

-Que tía, ya se le ha pasado-.

-Si, normalmente cuando se le acaba se pone muy sentimental...- dijeron dos integrantes del gremio.

-Bueno, a ver, ¿ quién quería una pelea?- y así comenzó una nueva gerra.

~~~ 1 hora y 45 minutos después~~~

-¡Jajaja! ¡He ganado! ¡Espera! ¡Que me tengo que ir!- sale corriendo en dirección al bosque Oeste.

-¿Ya este que le pasa hoy?- pregunta Lucy en voz baja.

oOo-oOo En el bosque Oeste oOo-oOo

-Bueno..., ya estoy aquí, que queríiiii....- pausa, su mirada se va elevando cada vez más alto hasta llegar a ver un rostro conocido- ...as. ¿Papá?-

-¿Quién sino?- era un dragón rojo con cicatrices por casi toso el cuerpo, pero eso no lo hacía terrorífico, sino que en ese caso era alegría- Papá...- unas lágrimas rebeldes comenzaron a salir de sus ojos- ¡Papá!- corrió a darle un abrazo.

-¿Por qué lloras Natsu...?- el dragón estaba alegre.

-Pensé que nunca te volvería a ver...-

FIN