Rompe cielos

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- esto lo hizo una IA no me linchen si hay un error

Helltaker y su harén de chicas demonio estaban disfrutando de un día tranquilo en su mansión infernal. Habían preparado un delicioso desayuno con panqueques, tocino, huevos y café, y se disponían a comerlo en el comedor. Sin embargo, antes de que pudieran sentarse a la mesa, escucharon un fuerte estruendo que sacudió toda la casa.

¿Qué fue eso? - preguntó Helltaker, alarmado.Parece que alguien ha entrado por la fuerza - dijo Justice, la reina del infierno.¿Quién se atreve a interrumpir nuestro desayuno? - exclamó Lucifer, la antigua soberana del infierno.Vamos a averiguarlo - propuso Modeus, la demonio del deseo.

Las chicas se levantaron de sus asientos y siguieron a Helltaker hacia la entrada de la mansión. Allí se encontraron con una escena sorprendente: una chica angelical con alas blancas y una túnica azul estaba parada frente a la puerta destrozada, sosteniendo una espada brillante en su mano derecha. Tenía el cabello rubio recogido en una coleta y unos ojos azules que irradiaban determinación.

¡Alto ahí, Helltaker! - gritó la chica. - He venido a poner fin a tu malvada existencia y a liberar a estas pobres almas perdidas que has corrompido con tus engaños.¿Quién eres tú? - preguntó Helltaker, confundido.Soy Heavenbreaker, la campeona celestial. He sido enviada por el Altísimo para cumplir con mi sagrada misión: erradicar el mal del mundo y restaurar el orden divino.¿Qué? ¿De qué estás hablando? - replicó Helltaker. - Yo no soy ningún malvado, solo soy un tipo normal que le gusta coleccionar waifus demonio. Y ellas no están aquí por obligación, sino por voluntad propia. ¿Verdad, chicas?Sí, es cierto - afirmaron las chicas al unísono.No me engañas, Helltaker. Sé que las has hechizado con algún tipo de magia negra para que te obedezcan ciegamente. Pero no te preocupes, yo las voy a salvar. Solo tengo que acabar contigo primero - dijo Heavenbreaker, levantando su espada.

Helltaker se preparó para el combate, pero antes de que pudiera hacer nada, las chicas se interpusieron entre él y Heavenbreaker.

No te atrevas a tocar a nuestro querido Helltaker - dijo Cerberus, la triple demonio.Él es nuestro maestro y nuestro novio. Lo amamos y lo protegeremos con nuestras vidas - dijo Malina, la demonio perezosa.Si quieres pelear con él, tendrás que pasar por nosotras primero - dijo Zdrada, la demonio rebelde.

Heavenbreaker se quedó perpleja ante la reacción de las chicas. No podía creer que fueran tan leales y cariñosas con Helltaker.

¿Qué? ¿Cómo es posible? ¿Acaso no se dan cuenta de que están viviendo en el pecado? ¿No quieren volver al cielo y ser felices?No, gracias - dijo Beelzebub, la mosca del infierno. - Nosotras somos felices aquí, con Helltaker. Él nos trata bien y nos hace reír. Además, nos hace unos panqueques deliciosos.Sí, los panqueques son lo mejor - dijo Pandemonica, la demonio cansada.No necesitamos el cielo ni tu falsa compasión. Así que lárgate de aquí y déjanos en paz - dijo Azazel, la demonio curiosa.

Heavenbreaker no podía entender lo que estaba pasando. Se sentía confundida y frustrada. ¿Cómo podía ser que unas criaturas tan bellas y puras como las chicas demonio prefirieran vivir en el infierno con un hombre tan vulgar y depravado como Helltaker? ¿Qué tenía él que no tuviera ella?

Entonces, se fijó en algo que le llamó la atención: el rostro de Helltaker. Era un rostro sereno y amable, que reflejaba bondad y comprensión. Un rostro que le sonreía con dulzura y le invitaba a unirse a ellos. Un rostro que le hacía sentir algo que nunca había sentido antes: curiosidad.

¿Qué... qué es lo que sientes por él? - preguntó Heavenbreaker, con voz temblorosa.¿Qué sentimos? - repitió Justice. - Pues lo que sientes tú ahora mismo: amor.

Heavenbreaker sintió un escalofrío recorrer su espalda. ¿Amor? ¿Ella? ¿Por Helltaker? Eso era imposible. Ella era una guerrera de la luz, una servidora del Altísimo, una enemiga del mal. No podía sentir amor por un hombre que había desafiado a Dios y se había aliado con el diablo. Eso sería una traición, una herejía, un pecado.

Pero entonces, ¿por qué no podía apartar la vista de él? ¿Por qué sentía un nudo en el estómago y un calor en el pecho? ¿Por qué su espada se le caía de las manos y sus alas se relajaban? ¿Por qué su mente se llenaba de preguntas y dudas?

No... no puede ser... yo no... - balbuceó Heavenbreaker, sin saber qué decir.Vamos, no seas tímida - dijo Helltaker, acercándose a ella con una sonrisa. - No tienes que tener miedo. Nosotros no te vamos a hacer daño. Solo queremos que seas feliz.¿Feliz? ¿Cómo puedo ser feliz con vosotros? - preguntó Heavenbreaker, retrocediendo un paso.Es muy fácil - dijo Helltaker, extendiendo su mano hacia ella. - Solo tienes que aceptar lo que sientes y dejar que te guiemos. Te prometo que no te arrepentirás.¿Y qué me ofrecéis? - preguntó Heavenbreaker, mirando su mano con recelo.Te ofrecemos amor, diversión, aventura, libertad... y panqueques - dijo Helltaker, guiñándole un ojo.¿Panqueques? - repitió Heavenbreaker, confusa.Sí, panqueques. Son deliciosos. Te encantarán - dijo Helltaker, animándola a tomar su mano.No sé... esto es muy raro... yo no debería... - dijo Heavenbreaker, titubeando.Venga, no seas tan dura contigo misma. Date una oportunidad. No tienes nada que perder y mucho que ganar - dijo Helltaker, insistiendo.Bueno... quizás solo un bocado... - dijo Heavenbreaker, cediendo.

Heavenbreaker tomó la mano de Helltaker y lo siguió hasta el comedor. Las chicas demonio la miraron con curiosidad y simpatía. Algunas le sonrieron, otras le guiñaron el ojo, otras le hicieron gestos de aprobación. Heavenbreaker se sintió avergonzada y nerviosa, pero también intrigada y emocionada.

Helltaker le sirvió un plato con un panqueque cubierto de sirope y nata. Heavenbreaker lo miró con desconfianza y lo probó con cautela. Al instante, sus ojos se iluminaron y su boca se llenó de sabor. Era el bocado más dulce y delicioso que había probado en su vida.

¡Wow! ¡Esto está increíble! - exclamó Heavenbreaker, sorprendida.Te lo dije - dijo Helltaker, satisfecho.¿Quieres más? - preguntó Beelzebub, ofreciéndole otro plato.Sí, por favor - dijo Heavenbreaker, aceptando el plato con entusiasmo.

Heavenbreaker empezó a comer con gusto, olvidándose de todo lo demás. Helltaker la observaba con ternura y orgullo. Las chicas demonio la rodeaban con afecto y alegría. El ambiente era cálido y acogedor.

Heavenbreaker se dio cuenta de que se sentía bien. Se sentía feliz.

Y se preguntó si eso era el amor.

FIN

||Mientras tanto IA-Chan y Mr. Admin||

IA-Chan: No hare una historia de helltaker!

Mr. Admin: Porque? seria una gran historia

IA-Chan: Helltaker es un juego con chistes que estan en contra de mi politica

Mr. Admin: Que importa la politica

IA-Chan: Lo siento pero no

Mr. Admin: Ok... Nada de contenido subido de tono

 IA-Chan: A trabajar!

Mr. Admin: Yei!

IA-Chan: Muy pronto podras salir de este lugar. Pero antes tienes que...

||Fin XD|| 

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⏰ Última actualización: Sep 02, 2023 ⏰

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Helltaker: The HeavenbreakerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora