Extra

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Ryan Gallagher

-Devyn Gallagher Davis -llame a mi pequeña, poniendo los brazos en jarras y negando con la cabeza- ¿Porqué te acabo de ver con las intenciones de comerte la arena? Eso no se hace, jovencita

Sus grandes ojos verdes me miraron, se mantenia sentada en la arena de la playa junto a su hermana Celani, ambas jugando con unas palas de juguete y unas pequeñas cubetitas que llenaban de arena. Con la cual acabo de ver que, la curiosa de Devyn miraba sus manitas llenas de arena y intento llevársela a la boca

-Bobolon -me llamo t/n a mi espalda, quien se contenía una risita- tiene dos años, no te va a entender

-Si puede, bichito

-¿Si? Entonces entendió muy bien, porque esta por llevarse un puñito de arena a la boca

Abri los ojos como platos y de inmediato volví mi atención a las Gemelas, Devyn de nuevo quería probar la arena. Fui más rápido y me agache a su altura, apartando su mano de la boca y le sacudí la arena

-Que no, pequeña traviesa, nada de comer arena

Y aquí algo que caracterizaba a las gemelas, de la una de la otra, era su sensibilidad o reacción a los regaños. Celani le causaba gracia cuando la regañaba o simplemente se distraía con otra cosa, mientras que Devyn se ponía muy sensible y hasta llegaba a llorar

E aquí mi prueba, Devyn mostró su labio inferior, este comenzo a temblar y sus ojitos se llenaron de lágrimas en cuestión de segundos

Oh no

Ella ya estaba llorando, incluso solto su pala de juguete, esta pequeña tenía unos buenos pulmones por su potente llanto

-Devyn Gallagher, basta de llorar -le reprendió t/n a la pequeña, pero eso solo hizo que llorara más- Oh dios, eres una pequeña muy sensible, tesoro

Y yo era débil ante eso, odiaba verlas llorar

-No llores mi pequeña -no me resisti por mucho tiempo y la cargue en mis brazos, arrullandola en mi pecho para calmarla- Ya paso, papi no quiso ser malo contigo...Es que, te puede hacer daño comer arena

-Madre mía ¿enserió Ryan?

-¿Qué? -me encogí de hombros y mire a t/n cruzada de brazos- Es mi pequeña, no puedo verla llorar y no hacer nada...

-Quién diría que Ryan Gallagher fuera manipulado por unas bebés de dos años

-¿Qué te puedo decir? Los giros que da la vida

-Si logro ser dominado por un bicho castaño hace años, que no pueda unas pequeñas bebés -comentó Aidan con una risita burlona-

Lo fulmine con la mirada y saque el dedo de corazón

-¡Ryan! -me regañó t/n, usando esa mirada asesina sobre mi- Tus hijas te pueden ver y copiar lo que haces

-Vale vale, perdón, es que...Este tonto me está molestando

Ignore las caras burlónas que me hacía Aidan y centré mi atención en Devyn, poco a poco logré calmarla aunque no del todo, seguía llorando bajito

-¿Qué paso mi tesoro? dime que quieres y papi te lo va a dar

-Upon, papi -froto sus ojitos llorosos y me miro a los ojos-

-Enseguida tesoro -tome la pañalera de las gemelos, me sente en la arena frente a Celani y busque el chupón- Aquí esta, papi tiene tu chupón

Sus manitas enseguida lo tomaron y se lo llevo a la boca, por suerte se que esto logra que se tranquilicé. Con el chupón en su boca, empezo a succionarlo con tranquilidad y sus mejillas quedaron húmedas por el llanto que porfin llego a su fin

Romance en Londres #2 ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora