El Pasado Tiene Más Historias Por Contar

Prólogo

Ya era hora de mudarme. La policía me buscaba, aunque era casi imposible que me encontraran. Cogí una maleta pequeña con lo necesario y aceleré el coche camino a Londres. Eran 8750 km en avión desde Los Ángeles, donde yo vivía, hasta Londres. No podía ir en avión ni loco, me pillarían. Lo que hice fue ir con mi coche desde Los Ángeles hasta un embarcadero de barcos que transportan grandes contenedores de distintos colores. El viaje en barco no fue para nada cómodo, y no porque me mareara, sino porque no me podían ver y solo habían policías dando vueltas por el gran barco. Eso parecerá menos inteligente que ir en avión, pero en el aeropuerto era prácticamente imposible que no me viera ningún vigilante.

Cuando llegamos a Reino Unido y atrancaron el barco, bajé corriendo mientras dos policías me perseguían. Ellos realmente no sabían que yo era un asesino, ya que eran policías de Reino Unido, no de California. Paré de correr en un callejón y me di la vuelta con las manos levantadas.

-Lo siento agentes, es que vengo de California porque me mude hace unos meses y mi madre, que vive por aquí, esta enferma y tengo que cuidarla. Yo no tengo mucho dinero, así que me tuve que colar en ese barco para venir lo más rápido posible.- balbuceé haciéndome el inocente.

-¿Ah, sí? ¿Y qué enfermedad tiene tu madre?- me preguntó uno de los policías con un acento muy marcado.

-Cáncer.- comenté sin pensármelo mucho.

Los dos policías se miraron y pusieron una de sus manos sobre su arma.

-¿Y por qué escapabas de nosotros?- me interrogó el otro.

-No quería que me metieran a la cárcel sin ninguna razón.- respondí con la voz apagada, sabía que no daba el pego.

Los dos policías cuchichearon entre ellos dos y suspiraron a la vez.

-Bien, pero enséñanos tu carnet de identidad.- me ordenaron.

-Está bien.- dije.

Metí la mano en mi bolsillo de la chaqueta, cosa que hizo que los policías se pusieran nervioso, y saqué mi carnet falso. Supuestamente, como el carnet decía, me llamaba Tom Thomas. Me acerqué lentamente a los policías y les entregué el carnet con una sonrisa. Uno de ellos cogió el carnet bruscamente y lo miró por encima para devolvérmelo.

-Emm, puedes irte Tom Thomas.- comentó el policía con su acento marcado.

Después, los dos se fueron dejándome ir. Aún no sabía cómo me creyeron, fue una mentira miserable, pero me dispuse a andar.

-Tom Thomas.- murmuré soltando un bufido mientras reía.

Cogí un taxi que me llevó hasta Londres. Le pagué algo más de dinero que lo que costaba y andé hacía mi nueva casa. Tuve que preguntar a 4 personas por la calle hasta llegar al piso donde viviría. Entré a él y subí por el ascensor hasta la planta 6. Al parecer, era un piso alto, tenía 15 plantas. Entré a mi casa y al ver lo grande que era, una sonrisa se creó en mi cara.

Empezaba mi nueva vida, o eso pensaba.
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¡Nueva novela!

Está la escribiré más lentamente, ya que quiero que esté ordenada y bien escrita.

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Os amoo personitas que no conozco <33