10

365 54 2
                                    

Drelindah Holt se quedó sorprendida de la enormidad del sacrificio del guardián, y aunque estaba conmovida hasta el alma, la culpa era abrumadora también

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Drelindah Holt se quedó sorprendida de la enormidad del sacrificio del guardián, y aunque estaba conmovida hasta el alma, la culpa era abrumadora también. De inmediato notó el cambio en Minho Lee. Mientras le hacia saber su decisión en la comida de la tarde, ella vio la dureza en sus ojos, un embotamiento del espíritu que era doloroso ver. Él mantuvo a su pareja pegado a su lado, no habló con nadie más que con Felix, y bajaba la cabeza con frecuencia para escuchar al hombre más pequeño. Minho había estado sorprendido cuando supo cómo exactamente era que Felix había salvado a Winian Anek, sus ojos habían brillado brevemente con orgullo. Pero no podía aferrarse a su felicidad, el peso de tener que separarse de Felix, era demasiado doloroso como para aplastarlo. El corazón de Drelindah le dolía también al ver a Felix, viendo el dolor incrementarse hasta que el pequeño hombre simplemente se apoyó en Minho. Cuando la puerta se abrió sorpresivamente, ella estuvo feliz por la interrupción.

Felix estaba tan absorto en su propia miseria que no se dio cuenta que estaba recibiendo un tirón para ponerlo de pie hasta que Minho comenzó a ladrarle órdenes.

― ¿Qué sucede?― preguntó mientras era arrastrado fuera del salón.

―Los hombres del rey no se retiraron, y estamos siendo atacados. Ellos están escalando las murallas en este momento.―

―Pero ese hombre, Lyan Han, el prefecto... él dijo que...―

―Él fue asesinado por su segundo al mando, marcado como traidor y cobarde, y ahora sus tropas nos atacan como había sido ordenado por el rey.―

Felix exhaló un enorme suspiro de alivio. ―Entonces yo puedo quedarme simplemente con...―

―No, ― Minho le interrumpió, arrastrándolo para que lo siguiera.

―Tú partes de inmediato hacia el velo. Estamos más cerca de lo que crees. Correrás a donde yo te indique, y cuando se levante la neblina estarás en casa.―

― ¿Tengo que irme ahora?― Felix casi se ahogó, ahogándose con terror.

―Sí, ― Minho dijo ausentemente, mirando rápidamente alrededor, siguiendo al río de hombres hacia la cocina y al exterior. El obscuro cielo estaba lleno de flechas en llamas; la gente corría por todas partes, el olor del humo llenaba el aire, el sonido del acero golpeando, gritos y gemidos.

―Espera, ― Felix se plantó firmemente. ―No estoy listo para...―

―No hay tiempo, ― Minho le interrumpió, sosteniendo sus brazos y agitándolo con fuerza. ―No tienes tiempo que perder, cairn, tienes que correr y no mirar atrás.―

― ¿Pero cómo sabré si estás bien?―

Minho no le respondió; sólo volvió a tirar de Felix y corrió. Felix tenía que correr o se caería y sería arrastrado por el guardián. Era aterrador; los hombres que caían heridos y moribundos frente a él, lo más aterrador era saber que era inminente dejar a Minho.

The Guard Dog - Minlix🐾Donde viven las historias. Descúbrelo ahora