CAPITULO 7: VERDADERAS IDENTIDADES

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El grupo protagonista va en búsqueda de Ricitos y los Tres Osos, quienes tienen una pequeña prueba puesta por el Bosque Oscuro con la siguiente frase: "Para tu deseo encontrar, debes la vista ajustar. Lo que buscas frente a tí puede estar".

Frente a la familia, aparece una cabaña que es igual a su hogar, dónde ellos entran a ver con mucha alegría su antiguo hogar.

En ese momento, Ricitos se impacienta por la actitud tan relajada de su familia oso, pero ella también se le muestra su día cuando llegó a la casa de los osos y como eso cambió por completo a su nueva familia.

Eso hace reflexionar a Ricitos por un rato junto con Mamá Oso.

Mientras tanto, Gato, Kitty y Leo están trepando un árbol, estando Leo de primeras ya que, aunque tenga un ojo, puede ver muy bien desde lejos con éste.

Perrito: ¡¿Cómo va todo?! - exclama a los tres - ¡¿Pueden ver algo allá arriba?!

Gato: ¡Aún no, Perrito! - se rompe una rama lo que hace se sujete con fuerza con sus uñas al tronco

Kitty: ¿Estás bien?

Gato: Sí, estoy muy bien, estupendo

Se rompe otra rama haciendo que casi caiga al suelo si no es por Kitty que lo sujeta a tiempo.

Kitty: Si querías tener mi mano, solo tenías que pedirla

Gato: Ahhh, si quieres ya puede subirme cuando lo creas conveniente

Leo observaba desde lejos la situación algo cómica y bastante romántica con algo de risa y comprensión.

Kitty: Ahhh, estaba recordando la última vez que te ofrecí mi mano, solo que esa vez te dieron escalofríos

Ese comentario tensa un poco a Gato y él sonríe nervioso por la siguiente conversación que quiere tener con Kitty mientras lo sube.

Gato: ¿Kitty? - ella voltea a mirarlo, pero él duda como debe empezar - Verás, aquel día... se supone que el Gato con Botas nunca tiene miedo, sin embargo, hasta aquella iglesia de Santa Coloma... fue... la primera vez que tuve miedo... así que... huí - dice con mucha sinceridad - Fue un error, Kitty - dice muy arrepentido

Kitty: Está bien

Gato: ¡No, no! ¡Fue una cobardía!

Kitty: Está bien - insiste

Gato: Tú ante el altar sola

Kitty: ¡Basta! - trata de frenar el tema

Gato: ¡Con el precioso traje de novia! - Kitty sujeta los hombros de Gato

Kitty: ¡Gato, dije que está bien! - exclama con sinceridad - Yo tampoco llegué - sube a otra rama

Gato: ¿Cómo? ¿Qué? - sigue a Kitty - ¡¿Qué dices?! ¡¿Cómo que tampoco llegaste?! - le pregunta algo exaltado

Kitty: Porque sabía que no podía competir con tu verdadero y único amor - confiesa

Gato: ¡¿Quién?!

Kitty: ¡Tú mismo! La leyenda - cubre los ojos de Gato con el sombrero de él

Gato: Ahhh

Kitty: No me quise presentar frente a él - le levanta el sombrero - Pero... tú ya no pareces ser el mismo tipo - le quita el sombrero para colocarselo

Leo: (Ojalá que fuera así, Kitty) - piensa mientras escuchaba la conversación y veía a su alrededor - ¡Chicos, vengan! - llama a ambos

Gato y Kitty llegan igual de alto que Leo y él les señala la cabaña que apareció en el bosque.

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