Capítulo 5

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DAMIAN:

-Aly... Perdón no quise...

-No me toques -sollozó a un más en el pecho de Noah-. Noah, quiero irme.

Quería ser yo quien la consolarla. Quería ser yo quien la tuviera en sus brazos. No quien la hiciera llorar.

-No te vayas -le supliqué-.

Ella no tomó en cuenta mis súplicas.
Mi pecho se estrujaba y sentía una sensación entraña que no me gustaba nada.

-Noah, quiero irme -repitió-.

-Shhh, esta bien. No llores pequeña. Vámonos.

Dijo mientras se daban la vuelta y desaparecían entre las personas que habían.

Poco a poco su olor se iba desvaneciendo y Adrik se movía en mi interior. Estaba triste, al igual que yo.

La había herido.
La había asustado.

ALLYSA:

Miré hacia atrás con un poco de temor.

-¿Quién es él? ¿Por qué quería que me quedara con él?

-Eso no importa. Pequeña, Nazly no va a venir con nosotros.

-No quiero que te vayas, Noah -me aferré mas a él-. Tengo miedo.

-Iremos juntos al departamento y me quedaré contigo ¿Si?

-Esta bien.

~¥~

Me desperté por la luz que entraba por la ventana. Ayer había llegado a mi habitación en un mar de lágrimas.

¿Quién era ese hombre y por qué actuó tan raro conmigo?
Estaba bueno, los rizos dorados caían por su frente y esos ojos verdes hipnotizaban.

Pero aún así, su comportamiento me había asustado.

Me levante de mi cama y caminé hacia el baño para asearme.

Una vez que salí, decidí ponerme unos jeans con una sudadera, aquí hacia frío.

-Lisa ¿Quieres ayudarme a hacer hotcakes? -escuché la voz de Noah desde la cocina-.

Una de las cosas que amo hacer, es cocinar, según Nazly y Noah, mi comida es rica.

-Voy.

Fui caminando hacia la cocina y encontré a un Noah alegre y una Nazly muriendo.

-¿Y a ti que te pasó? -le pregunté-.

-Digamos que llegué tarde anoche y Noah me obligó a levantarme.

Reí un poco y fui tomando las cosas para cocinar

-¿Quieren ir al centro comercial?

-¿Aquí hay centro comercial?

-Si. Hay personas que nos le gusta salir del pueblo así que han construido varias cosas.

-Bueno, quien se puede negar a ir al centro comercial.

~¥~

Llevábamos media hora caminando de tienda en tienda. Yo ya había comprado muchas cosas y estaba convencida que no quería gastar más dinero. Por otro lado Nazly no sabia que comprar. Y Noah se comportaba raro.

-Nazly, mejor vamos a otra tienda -le sugirió Noah-.

-No quiero. ¿Por qué tanta prisa?

-Nada. Solo que ya me aburrí.

-Tengo que probarme esto y nos vamos -suspiró antes de entrar a un vestidor-.

Fui caminando por la tienda solo mirando y repitiendo mentalmente que no compraría nada más, hasta que encontré un vestido blanco con adornos en plateado. Era simplemente hermoso.
Me gire hacia Noah y se lo mostré

-¿Crees que me quedara bien?

-Te verías más hermosa de lo que eres.

Escuché un gruñido a lo lejos pero le resté importancia. Ya no me sorprendería si llega alguien y me dice que es un duende. Este pueblo sí que es extraño.
Entre en el vestidor y me lo probé, luego salí para que Noah me dijera que le parecía.

-¿Y?

-Te ves hermosa, más hermosa de lo que quisiera admitir -sonrió-.

Volví al vestidor y luego me dirigí a la caja para pagar el vestido.

Después de unos minutos salió Nazly con varias prendas en sus manos. Y se dirigió a la caja también.

-Vamos.

-Nazly, ya no quiero caminar.

Ella se encogió de hombros  y me tomó del brazo

-Ven Ly, tu vienes conmigo. Deja al amargado en paz.

-No me dejen atrás. Tu si me quieres Lisa ¿Verdad?

-Esta es la última tienda. Lo prometo, no me demoro, si quieren pueden quedarse afuera.

-Quédate conmigo - Dijo Noah andes de mirarme con ternura para luego abrazarme y empezar se a restregar en mi-.

-Noah... ¿Qué haces?

-Nada.

-Me empiezas a asustar. Te has estado comportando raro desde que llegamos.

Él siguió abrazándome pero con más fuerza.

-¡Suéltala! -Escuché una voz conocida detrás mío.

Lo mire y ahí estaba él con su pelo revuelto y sus ojos verdes esmeralda

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S.Z 🌼

La luna sabe porqueDonde viven las historias. Descúbrelo ahora