Capitulo 5

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•CATHERINE•

Observo al chico que me tiró el café encima.

Era alto, su piel era de un tono moreno, su cabello era castaño claro, mientras que sus ojos eran de color miel, sus ojos eran muy hipnotizantes, me encanta ese color, siempre me a gustado ese color de ojos, tenía buen cuerpo, se le nota que se esforzaba por tenerlo ejercitado; tenía puesto un pantalón de mezclilla negro y una camisa, que hace que resalten los músculos de sus brazos, del mismo color, tenía puesto unos tenis blancos y unos lentes de sol. Era muy, pero cuando digo muy es que es bastante atractivo, pero eso se le resta ya que es un idiota, y no sabe pedir disculpas.

- No, no voy a perder mi tiempo con una niñata- dice para pasar por mi lado.

- Idiota- digo bajo para que no me escuchará, pero como la mala suerte está de mi lado esta semana, me escuchó.

- Niñata- dice y se pierde fuera del café.

Yo agarro aire, y me dirijo hacia la recepción.

Ahí me atiende una chica al rededor de los veinte, tenía una sonrisa entre amable y burlona en su cara.

- Buenos días, ¿Que desea?- pregunta amablemente.

Miro el aviso de arriba donde están los productos más famosos de su cafetería.

Algunas mesas me veían raro, otras se reían y me miraban.

Al fin decidí y pedí mocaccino.

Mientras esperaba a que me trajeran el café siento que mi celular vibra en el bolsillo trasero de mi pantalón.

Lo saco y veo que es un mensaje de Claire.

Abrí nuestro chat y leo.

"Ya te extraño fea"

Me río y escribo una repuesta.

"Yo igual loca"

"No hagas nada que no se debe sin mi presencia"

Me leé el mensaje y sale el escribiendo.

Segundos después me sale su respuesta.

"Por finn"

"Puedo ir al concierto de morat solaa"

Yo abro los ojos como platos y escribo rápido una respuesta.

"Ni se te ocurra"

"Al menos me invitas rata"

Otra vez sale el "escribiendo"

"No"

"Tu molestas mucho"

"Me tengo que ir, hablamos luego"

"Te quiero fea"

Yo sonrió con nostalgia y escribo.

"Yo a ti fea"

Guardo mi celular otra vez en mi bolsillo y lo que había pedido apareció en mi campo de visión.

- Aquí está, son cinco euros con cuarenta y siete- me dice.

- Gracias, aquí tienes, me puedes dar una servilleta, es que como puedes ver, me lanzaron el café encima.

El corazón o el tronoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora