♡C O N T R O L/ KRBK ONE-SHOT♡

C O N T R O L

Era de noche.

Kirishima observó como su novio se retiraba su camisa lentamente, de manera cautivadora frente a él, de espaldas, retirándosela botón por botón, de una manera tortuosa; provocando en Eijirou mil reacciones de sentimientos que florecían en su ser y terminaban en la punta de su miembro, el cual exigía atención a gritos.

Bakugo terminó con su dedo índice en el último botón de la camisa, donde lo desabrochó, pasó la prenda blanca por sus hombros pálidos teñidos de un suave rojo a velocidad de caracol, los movía seductoramente y, a la par, sus ojos se pegaron con los de Kirishima un momento.

Oh.

Esa mirada, esa mirada de desesperación absoluta escondida bajo el manto de la calma, con sus párpados caídos y sus cejas un poco inclinadas, indicaban que Bakugo estaba realmente caliente ahora mismo.

La prenda cayó al suelo provocando el último sonido antes de pasar sus manos por su abdomen, luego hasta su cadera, tomando camino por sus gruesos muslos y terminando finalmente en las rodillas. Provocando por reacción que su cuerpo se inclinara hacia delante, quedando agachado frente a Kirishima, quien ahora mismo tenía la vista perfecta del trasero de Katsuki, y un poco mas allá veía su cabellera rubia.

Quedó paralizado.

Después de todo ese espectáculo las palabras no salían de su boca, simplemente se bloqueó furtivamente, tembló ante la excitación que reaccionó en él. Probó mover su mano, pero estaba muy lejos de eso, nisiquiera un centímetro.

Katsuki guió sus dos palmas al borde de su pantalón de mezclilla azul, donde lo tomó y de paso agarró su bóxer, indicando que bajaría los dos de una.

Sin embargo, cuando comenzaba a bajarlos, retrocedió. Paró su accionar y vió a su compañero tras él totalmente en shock. Su novio le dirigió ese tipo de pupilas que sólo Kirishima conocía, esos tipos de ojos que decían miles de palabras sin realmente decir ninguna. Kirishima respiró fuertemente, su aliento chocando contra su trasero envuelto en ese pantalón estorboso.

Bakugo bajó, quedó agachado con sus manos en sus rodillas, todo a un ritmo lento, a un ritmo cautivador... A un ritmo que hizo que el corazón de Kirishima palpitara de emoción, y también su pene, por supuesto.

Sus palmas que anteriormente se posaban en sus rodillas ahora iban hacia las de Kirishima, quien yacía aún sentado en la suave cama, las tomó y posteriormente las guió hacia la parte de atrás de donde sus manos se encontraban.

Eijiro tragó saliva.

Bakugo presionó sus manos suavemente,  y las fue subiendo por sus muslos, manoseándose a si mismo, pero con las palmas de Kirishima antes de las suyas. Las movió provocativamente sobre sus fornidas piernas, pronto estas tomaron camino por sus sexys caderas donde se permitió presionar un poco, jadeando después de todo este tiempo.
Porque si, Bakugo estuvo absolutamente callado hasta ahora. De él no salía nada más que su respiración desesperada, y en algunas veces se entrecortaba cuando sentía su polla palpitar de la excitación debido al acto tan sucio que cometía... De lo desesperado que se veía en ese momento, gruñó bajo por eso.

Ahora las palmas de Eijiro estaban en el borde de su pantalón donde lo juntó con su bóxer, después volvió a agacharse; dejando que su novio hiciera todo el trabajo.

Eijiro soltó un suspiro por la nariz que estaba guardando desde que sus manos mortales estaban apretando esas caderas celestiales blancas. Viendo como Katsuki quitaba sus palmas de las suyas y volvía a agacharse sobre sus rodillas supo lo que quería que le hiciera.

Sus dedos tomaron la liga del bóxer contrario y la terminación del jean ajustado que dejaba ver su apetecible culo esponjoso, pero Kirishima lo prefería desnudo, con esas marcas que solo él sabía hacer.