PRIMERA PARTE TERMINADA
SEGUNDA PARTE EN CURSO
❝ 𝐃𝐎𝐍𝐃𝐄 𝐉𝐔𝐋𝐈𝐄𝐓𝐀 decide dejar de ser la sombra de su madre y ir por el camino que ella quiere. Yéndose a Barcelona con su mejor amiga, sin importarle lo que le espera en el futuro ❞.
❪ Pablo...
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JULIETA MARTÍNEZ
NUNCA ME HABIA PUESTO A PENSAR QUE IBA A PASAR en el futuro y ahora que estoy a punto de tomar un vuelo a Mónaco, me pregunto si este será mi futuro.
Toda mi vida me imagine que estaría en Madrid, que mi futuro era ser maestra, y nunca me mudaría del país.
Ahora ni siquiera sé que imaginarme sobre mi vida, no sabía si era lo correcto irme, no estaba completamente segura si abandonar esta ciudad y dejar a mis amigos.
Mi mente sólo estaba en blanco, dejando que esta decisión la tomara yo, y solo yo. Pensar en dejar Barcelona, en estos meses fue realmente difícil para mí.
Pero sentía que este ya no era mi lugar, necesitaba explorar más, dejarme llevar y poco a poco dejar esta ciudad que alguna vez jamás pensé dejarla.
Intento no pensar mucho en lo que pasará en el futuro, sino disfrutar el ahora, es algo que me he estado intentando pensar durante estos días.
Mis pensamientos son interrumpidos por una llamada, no me sorprende para nada ver el nombre de Dante, pues lleva toda la mañana llamándome.
— No, aun no tomo el vuelo — hablo y me sorprende el tono de voz de estrés que se escucha en mi —. Faltan 15 minutos.
— Solo quería saber cómo ibas, uno ya no puede llamar para ver como esta su hermanita.
— Bueno, seria normal si me llamaras una vez, no 7 veces en solo 3 horas.
— Solo estoy preocupado, ¿okey? — solo suspiro —. Es la primera vez que tomaras un vuelo tú sola.
— Ya no soy una niña Dante — digo un poco calmada —. Me las puedo lidiar yo sola.
— No me importa, sigues siendo mi hermana menor, aún tengo prioridad de cuidar de ti.
— Lo sé Dante — veo la hora —. Te prometo que, si pasa algo, tú serás el primero en que llame, ¿okey?
No escucho nada y con solo eso, sé que está de acuerdo. Sé que Dante le daba un miedo los aviones y saber que yo me subiré a uno sola, a él le causa mucha ansiedad.
— Estaré bien — vuelvo a hablar —. En serio, no te preocupes.
— Prométeme que me llamaras por cualquier cosa.
— Te lo prometo.
No dice nada, aunque sé que está asintiendo, solo escucho como alguien le habla y él solo me cuelga sin ni siquiera despedirse.
No me sorprende, es muy normal en él, colgar sin siquiera haberse despedido, así que por ahora solo guardo el celular.
Para después dar un repaso a las personas que estaban alrededor mío. Por el momento pienso que soy la única nerviosa, pero a los segundos una pareja se sienta a mí y el chico intenta calmar a la chica.
