Cruel Summer ● fred weasley fanfic

07 DE AGOSTO 1994

Fred estaba impaciente, habían quedado en ver a Olivia en su árbol ese día y después de carcomer su cerebro con ideas para decirle que le gustaba llegó a la conclusión de no decirle nada, no quería arruinar la amistad y lo mejor sería mantener las cosas como estaban, pero no sabía porque dichos pensamientos de ella rechazandolo sin qué él dijera nada lo hacían temblar.

—¿Por qué esa cara larga pelirrojo? —la voz de una chica lo sacó de sus pensamientos haciéndolo subir la mirada de su regazo para encontrar a una castaña de cabello largo con shorts cortos y una blusa de tirantes frente a ellos.

—¿Olivia? —preguntó su gemelo sorprendido

—¿George? —preguntó sarcástica expresando una sonrisa juguetona

—Oli —dijo con emoción George levantándose de su asiento y rodeando la cintura de la chica alzando y haciendo soltar un chillido después unas risas mientras el chico daba vueltas con ella en brazos

Fred apenas y pudo ponerse de pie limpiando sus manos en su pantalón había comenzado a sudar y no se había dado cuenta cuando.

—George, estás muy alto ¿Cómo crecen tan rápido? —preguntó tomando las mejillas del George para examinarlo sin que el chico la soltara— ¡Y miren su cabello! Se ven muy guapos

—Lo sabemos, somos la sensación en Hogwarts —dijo el pelirrojo arrogante haciendo reír a la chica mientras la bajaba

A Fred le causaba un poco de envidia como George podía desenvolverse con tanta facilidad con Olivia, normalmente nunca mostraba esta parte arrogantemente sarcástica con nadie que no fuera de su completa confianza. Mientras que él no podía ni mirarla a los ojos desde el último verano en que se vieron, siempre era más tímido con ella, tenía miedo a hacer algo que la terminará alejando.

—¿Y tú no dirás nada? ¿Ni un abrazo a tu amiga del alma? Ven y abrazame Weasley que no te veo hace casi dos años— preguntó la chica con los brazos abiertos sacándolo de sus pensamientos haciéndolo sonreír

—Eres una mandona ¿Sabías? —dijo negando con la cabeza mientras se acercaba hasta rodear su cintura en un abrazo fuerte

—Y así me quieres no lo niegues—dijo divertida abrazándolo más fuerte

Fred se dejó llevar por sus sentidos, la cintura de Olivia era más pequeña de lo que creía, el short hacía ver sus piernas más largas y su cabello también había crecido bastante, su voz ni se diga, se escuchaba más como la de una chica madura, una chica de dieciséis. Pero su sonrisa seguía siendo la misma, su sonrisa y su olor, ella olía siempre a frutos rojos y pergamino. A Fred le encantaba ese olor. Y ella era la misma Olivia de siempre.

—Te extrañe idiota —le susurro la chica

—Y yo a ti Oli—dijo riendo

—¿Ya terminaron con su reencuentro romántico o quieren que me vaya para que puedan besarse? —dijo George cortando por completo el momento

—Si serás imbécil —la chica soltó a Fred para ir detrás del pelirrojo menor haciéndola rodear el árbol hasta que logró darle un golpe en el brazo.

—Bueno ya. Me prometiste un regalo de tus vacaciones —Fred la tomó de la cintura con una mano y extendiendo otra frente suya antes de que la chica se abalanzara contra su hermano

—Oh cierto—dijo recordando—. Les traje un pequeño llavero, se supone que está es la estatua de la libertad —dijo sacando dos pequeños llaveros de sus bolsillos entregándolo a cada uno—, los franceses la regalaron a los americanos, no me pregunten el porqué, porque realmente no lo sé no puse atención a la explicación del guía.