Siempre Estaré Para Ti Gabenath

Visita no deseada

Gabriel se incorporó de manera rápida
- ¿Amelie?- preguntó el
- ¿Quién más podría ser, Agreste? Tenía que comprobar por mi cuenta si eran ciertos los rumores-
- ¿Como entraste?- preguntó el rubio, nuevamente
- Tu chófer me dejó pasar, ¿Cómo pudiste, Sancoeur? Mí hermana te adoraba-
- Espera un segundo, Graham, yo no estoy haciendo nada malo- dijo Nathalie, poniéndose de pie, dirigiéndose a la rubia
- ¡Estás con el esposo de mí hermana!-
- Emilie ya no está con nosotros, Amelie, estoy segura que ella entendería esto, yo no planeé nada, simplemente sucedió y créeme cuándo te digo que Emi era la persona más dulce de todas, sabiendo lo que pasaría, me dejó la tarea de cuidar de Gabe y Adrien...- sin que nadie interpretará el movimiento de la rubia, está golpe a Nathalie en el rostro, sorprendiendo a todos
- No tienes ningún derecho a llamarla de esa forma, fuiste su mejor amiga y la traicionaste- la azabache se volvió con una sonrisa en el rostro
- Vaya, vaya, la rubiecita molesta salió a la luz, bravo...- ella intento golpear de nuevo a la azabache, pero está lo esquivo, barrió su pie, provocando que Amelie se caiga
- ¿En serio creíste que tú golpe lograría algo conmigo? Ingenua, será mejor que te largues o yo misma te saco- la rubia se paró, indignada
- Me las pagarás, Sancoeur y muy caro- se fue, dejando unos rubios estupefactos y a la azabache molesta e irritada
- Maldita...- murmuró ella
- ¡Wow, mamá, eso fue increíble!- exclamó Adrien, sacándola de sus pensamientos, se volteó, sonriendo
- Gracias, cielo...- al ver a su pareja en silencio, se preocupo
- ¿Gabe?- este puso los ojos en blanco y se desmayo del asombro
- ¡¡Gabe!!- Nathalie agarró como pudo a Gabriel y acomodó su cabellera rubia en sus piernas
- Adrien, busca a Gorila y dile que llame a un doctor, necesitamos llevarlo a nuestro cuarto- el menor entra rápidamente a la Mansión
- Por favor, Gabe, despierta- empezaba a sentirse mal, esa pequeña personita en su interior, sentía su preocupación, provocando malestares.
Gorila lo cargo y lo llevaron al cuarto de ambos
- Gracias, Jacob, yo me encargó desde aquí- Adrien se sorprendió del nombre usado con Gorila, después le preguntaría
- Mamá ¿papá está bien?-
- Si, cielo, simplemente tu padre se sorprendió mucho, es todo- el susodicho abrió los ojos
- ¿Nath?-
- No te esfuerces, amor, entraste en shock-
- Creo que me sorprendió mucho verla aquí, de verdad, no la esperaba, además ¿Por qué Gorila la dejo entrar?- preguntó sentándose
- El no la dejo entrar, prácticamente entró sin permiso, Gorila bajaba las telas del auto, paso en las narices de el, sin que lo notará-
- Tenemos que mejorarán la seguridad de la Mansión-
- No, querido, mantenerla fuera del camino sería una solución, sabes muy bien lo manipuladora que es Amelie- comentó Nathalie
- ¿Y si mejor salimos de paseo para olvidarnos de esto?- preguntó el menor
- Tal vez más tarde, tu padre tiene que descansar, órdenes del doctor- demandó ella
- Ya hablo tu madre, hijo-
- Bueno, iré a mí habitación- la azabache miro a su pareja
- ¿Te sientes mejor?-
- Si y tu ¿cómo estás?-
- Bien- respondió con rapidez
- ¿Segura?-
- Tu ganas... Estoy embarazada-
- Ya lo sabía-
- ¡¿Qué?! ¿Cómo lo...?-
- Dussu me lo dijo, comentó que tus náuseas eran por eso, tenías un ser dentro tuyo- l
- Aunque fue demasiado rápido, no pensé que en tan poco tiempo, terminará embarazada-
- Si... no perdimos tiempo- el se ríe, recibiendo un golpe suave en su hombro
- No te pases, Agreste, puedo dejarte postrado en esa cama-
- De acuerdo, Sancoeur, dejaré de bromear-
- Te amo, Gabe- dijo ella, besándolo, olvidando su pequeña pelea
- Yo también te amo, Nath, demasiado, me haces el hombre más feliz de la tierra- ella sonrió ampliamente y se acostó a lado de su pareja. Ambos se quedaron dormidos, imaginando a la pequeña personita que pronto tendrían en sus brazos

Al día siguiente

Ambos adultos se encontraban en la oficina, el tema de Amelie seguía palpable, pero no decían nada, el saber que ella estaba aquí, los asustaba, un poco, a Nathalie más que nadie.
La azabache soltó un suspiro, irritada,
- ¿Estás bien, amor?-
- Me estresa pensar que Amelie está en París-
- No debes estresarte, cielo, le hace daño al bebé-
- ¿Bebé?- preguntó Adrien abriendo la puerta
- Si, hijo, mí Nath está embarazada-
- ¡¿Tendré un hermanito o hermanita?!- exclamó, abrazando a su ex-tutora/mamá
- Así es, cielo, recién tengo dos meses, todavía no sabemos el sexo del bebé-
- No puedo esperar por saberlo-
- Ni tu padre y yo podremos esperar-
- Que grandiosa noticia ¿podremos salir a celebrar?-
- En un rato más, tu padre y yo terminamos, subire a verte- el joven salió, cerrando la puerta
- Yo ya había terminado-
- Igual yo, es solo qué...- una arcada la interrumpió, salió con velocidad, pasando a lado de Adrien
- ¿Mamá?- ella entró al baño tambaleando y vómito, el diseñador entró a auxiliarla
- Nath, aquí estoy- estuvo así unos minutos, hasta que alzó la cabeza, suspirando
- Si...si, ya estoy mejor, esto normal-
- ¿Segura?-
- Si-
- Mamá ¿todo en orden?- dijo Adrien, entrando al cuarto
- Si, si, no se preocupen, me alistare para salir- ambos dejaron la habitación, no muy convencidos.
Ella se puso un vestido negro con rosas en la falda y unos botines del color del vestido, soltó su cabello y bajo las escaleras
- Estoy lista- ambos abrieron los ojos, asombrados
- Siempre tan hermosa, amor-
- Gracias- caminaron por las calles de París con un clima bastante agradable, pero no esperaban que alguien los siguieran

La_chica_Sancoeur