Pedido de Ryu-tachibanaSW
Contexto: te llamas Lourdes Walker. Tu cabello es rosado plateado. Tus ojos son dorados.
Yuri Katsuki y Lourdes son amigos de la infancia. Ambos se llevan muy bien. Sin embargo, ella parece un chico debido a su vestimenta. Ropa holgada como él. Todas las personas que la conocían creían que era un chico. El único que realmente sabía que era una chica era Yuri.
Incluso Victor la veía como un chico, por lo que no le prestaba una atención especial, pero con quién estaba encantado. Ella siempre había tenido sentimientos hacia Victor pero nunca dijo nada. A veces le daba regalos como admiradora secreta, pero él estaba demasiado acostumbrado a eso por lo que nunca prestaba demasiada atención.
Ella también patinaba. Era profesional. Efectuaba unos giros y saltos perfectos.
Un día, que hicieron una competición de las ligas femeninas. Para muchos fue un gran shock descubrir que Lourdes patinara ahí.
Yuri y Victor también fueron a verla, y el albino se sorprendió de que fuera una chica, pues siempre había pensado que era un chico. Al darse cuenta, las cosas cambiaron en varios sentidos.
La chica ganó la competencia y todos estuvieron muy contentos.
Al salir, decidieron ir a celebrar a un restaurante.
- Lourdes, tienes un momento?- preguntó Victor.
- Claro.
- Verás...me avergüenza decir esto pero...hasta hoy creí que...eras un chico...
Lourdes se sintió algo extraña, pues se dio cuenta de que si siempre había pensado eso, lo más seguro era que nunca hubiera leído sus cartas y mirado sus regalos.
- Oh, sí...no pasa nada....todo el mundo lo cree...o lo creía...- regresó con Yuri algo desanimada.
- Qué te pasa? Has ganado, deberías estar feliz- dijo mirándola preocupado.
- Es...son cosas mías...no me hagas caso.
Se limitó a sonreír y decirse a sí misma que Victor nunca se fijaría en ella ya que tenía a muchas otras chicas más por delante de ella. Sólo sería una del montón.
Cenaron "felices" y luego fueron a tomarse un helado.
- Oh Dios! No puede ser!- exclamó Yuri.
- Qué pasa?- preguntó ella.
- La cartera! Me la he dejado en el restaurante!
- Ay señor...- Lourdes se puso la mano en la frente- pues corre a por ella.
- Vale. Espérense aquí. Ahorita regreso.
Se fue corriendo.
Victor y Lourdes se quedaron a solas.
- Oye Lourdes...una preguntita...puedo...saber tu apellido?
- Walker. Por?
- No, por nada. No es nada. Cosas mías. A cualquier persona se le pasan cosas por la cabeza no? Es algo normal!
La pelorosa se asustó un poco ante el extraño comportamiento repentino del albino.
- Eh... sí...supongo que sí...
Se instaló un silencio incómodo.
- Eh...y...bueno...desde cuándo patinas...?
- Desde que era pequeña. Iba con Yuri a las pistas de hielo cuando descubrí que era mi pasión así que mis padres me apuntaron a clases de patinaje sobre hielo. Desde entonces dedico mi vida a eso profesionalmente. Y es algo que realmente me gusta.
- A mí también me gustas- DIGO GUSTA! TAMBIÉN ME GUSTA PATINAR- sonrió sonrojado.
- Eh...y-ya...si...- llamó a Yuri. El azabache lo cogió enseguida- cuándo vas a volver? Me siento incómoda...- dijo susurrando mientras Victor pensaba en sus cosas como siempre.
- Ya voy. Estoy en la esquina. Dos minutos estoy allí.
- Okey bye.
Miró al albino. Aprovechó que él no la miraba para admirar sus facciones, sus lindos ojos, su lindo cabello.
- Lindo...
- Eh?
- RINDO! Digo que...que nunca me rindo!
- Oh! Yo tampoco. Por eso estoy así hoy en día.
- Sí...
- Ya estoy aquí!- es oyó la voz de Yuri.
Jadeaba por haber estado corriendo al ir y al volver y traía su cartera en las manos.
- Ya podemos...comer...tranquilos...madre mía voy a vomitar la comida... Dios...uff...
- Ya tranquilo. Con un heladito se te pasa.
Pasó un tiempo. Lourdes se encontraba entrenando. Estaba haciendo una nueva coreografía. Escuchó que alguien entraba en la sala pero simplemente se centró en la música y en los pasos. No existía nadie más. Hasta que...
- Lourdes...?
Miró al propietario de la voz y al ver quién era se sonrojó y perdió el equilibrio, provocando que pisara mal y se tambaleara pero sin llegar a caer.
- Victor...hola...
- Quería hablar contigo.
- Okey...dime...
- Puedes salir un momento aquí?
Ella salió de la pista.
- Qué ocurre?
- Verás...quería disculparme por comportarme tan raro últimamente...yo...
- No importa...
- Quería preguntarte algo...
- Dime.
- Lourdes Walker...aceptarías ser mi novia...?- le mostraba un anillo de plata.
- Q-qué...?
- Sé que suena raro pero...me gustas...
- Oh...bueno...a mi...me gustabas desde hacía mucho tiempo...
- De verdad...?
- Sí...pero...nunca creí que te fijarías en alguien como yo...
- A veces...lo que importa no es el exterior....sino lo que hay en el interior...
