ORV "Novela Paralela"

Cap 558. <Episodio 2. Reescribir (3)>

–¿De qué diablos estás hablando?

El primero en reaccionar a mi declaración fue el grandullón.
He escrito muchos personajes como él a lo largo de toda mi carrera como escritor, así que sé qué hacer cuando esto sucede.
Intenté parafrasear a Kim Dokja.

–Has estado luchando contra un muro impenetrable, y ahora ya terminaste. Como probablemente ya te habrás dado cuenta, eso no te sacará de esto.

–¿Qué? ¿Cómo sabes eso?

–No hagas la vista gorda ante la realidad.

Al encontrarme a los ojos, el grandullón se estremeció.

–A menos que realmente quieras morir.

Un escalofrío recorrió la estación como si alguien la hubiera echado agua fría.

[Las encarnaciones de la estación se sorprenden por tus palabras.]

[El efecto de tu atributo exclusivo está fuertemente activado.]

[Tu influencia en el área del escenario se vuelve un poco más fuerte.]

Entonces este es el atributo de mi personaje.
Sorprendentemente, no es un mal personaje.

–Tal vez quieras escuchar a este tipo, él sabe algo sobre la situación.

Cuando el ahjussi añadió su oportuno comentario, la gente se volvió para mirarme y tembló.
No me perdí el momento en que el humor cambió.

–Ahora, como todos sabéis, esto es real. No es el rodaje de una película, no es un sueño. Ni la policía ni el ejército vendrán corriendo a salvaros, y si cometéis un error, realmente podríais morir. Sin embargo, Si me escuchan, estarán todos a salvo.

Por fin, algunas personas se reunieron vacilantes.

Unas diez personas.

No fue un mal comienzo.

Un joven en la primera fila pregunto.

–¿Qué eres, ahjussi, un soldado o un policía?

–Yo solía ser...

Mis palabras aumentaron el alboroto.
No era mentira, ya que me había retirado como sargento del ejército.
Fue entonces cuando se acercó el diácono, que había estado escuchando desde lejos.

–¿Realmente sabes algo sobre esta situación?

–Sí.

–¿Cómo?

–No tiene sentido entrar en detalles porque, francamente, no importa cómo lo explique, no es una situación fácil. Si de repente te dijera que Dios está enojado por tus pecados y te envió una prueba, ¿me creerías?

Di un ejemplo alegre, pero los ojos del diácono se entrecerraron y murmuró.

–Pecados... pruebas...?

Debo haber tocado el interruptor equivocado.
El tipo grande que escuchaba la conversación a mi lado se enojó.

–¿Me estás tomando el pelo?

Normalmente, su comportamiento brusco me habría intimidado.
Pero el Lee Hakhyun de hoy era diferente.

–De todos modos, si quieres escucharme, escúchame, y si no, ve para allá y sigue empujando contra la pared. Honestamente, no me importa si solo este ahjussi y yo sobrevivimos.

Este tipo de descaro habría impresionado incluso a Kim Dokja.
Quizás la persuasión funcionó, algunas personas se miraron y compartieron sus opiniones.
El más activo fue el diácono.