Starquintilliz

Día 2: Entre Sombras y Revelaciones

Nino: ¿Eres tú el chico de la foto? - mirándolo gloriosamente como si de un ángel bajado del cielo se tratara.

???: ¿Foto? ¿A qué te refieres? ¿Es acaso algún juego de palabras? - Extendiendo la mano para ayudarle a ponerse de pie

Nino: No... bueno... no importa. -Poniéndose de pie y observándolo con detenimiento: ojos avellana, cabello rubio y estatura alta, para ojos de cualquiera el chico perfecto- Sabía que varias escuelas tenían este lugar como centro turístico, pero no sabía que lo hacían el mismo día. Ahora me siento más segura. Dime cuál es tu nombre. -el chico solo quedó confundido.

???: (¿Nombre? Pero si tú y yo ya nos conocemos, y no de buena forma diría yo) -revelándose internamente el rubio, que no era otro que Fuutarou- (¿Ahora qué hago? ¿Por qué se comporta así? ¿Acaso tienen problemas de memoria? Debe ser por eso que no aprenden nada).

Nino: En la foto que vi ya me parecías demasiado genial, pero en persona superas mis expectativas. Ese pelo rubio es extremadamente guapo en ti.

Fuutarou: ¿Foto? ¿¡Rubio!? -llevándose la mano a la cabeza y dándose cuenta de que llevaba algo diferente de lo normal- (Cierto, estoy disfrazado con la peluca. Por eso no me reconoce. Espera, puedo tener esto a mi favor. Aunque de qué forma puedo hacerlo).

Nino: Sabes, aunque ese rubio es algo distintivo de ti, tienes la misma aura que él -refiriéndose a Fuutarou-.

Fuutarou: (Y si en vez de aprovecharme le digo la verdad. Es cien por ciento seguro que me dará una golpiza, pero es lo más ético. Lo malo es que ella podría chantajearme libremente y si escapo sin que se dé cuenta).

Nino: Hey, espera. No quería decirte esto, pero me separé de mi hermana. ¿Me podrías ayudar a encontrarla?

Fuutarou: (Parece que se escapó mi oportunidad). En eso, él se acercó y aceptó la búsqueda sin antes decirle su nombre.

Nino: Entonces, tu nombre es Kintarou. Por alguna razón me suena familiar.

Fuutarou: (Solo le cambié las primeras tres letras. No es tan difícil. Solo espero encontrar rápido a Itsuki o sino) -girando y mirando a Nino, la cual se sonroja por verlo- (Quedaré atrapado con la loca, pero quizás podría actuar diferente. Sí, si actúo más rebelde, quizás ella perderá cualquier interés por mí). Sabes, me muero de salir de este lugar y empezar a fumar un rato. ¿Lo sabes, cierto? Romper leyes.

Nino: Amo a los chicos malos. -al escuchar eso, Fuutarou se sorprendió bastante, pensando él, ¿cómo alguien puede amar a un matón de la calle?-

Fuutarou: (Esto empeoró la situación, que era lo que no le gustaba a Nino) -levantando la mirada y viendo las estrellas.

Nino: ¿Qué estás haciendo? -acercándose lentamente a Fuutarou por su espalda.

Fuutarou: Estoy tratando de encontrar el norte a través de la estrella polar. Esta es especial porque siempre apunta hacia el norte.

Nino: ¡Wow, eres bastante culto! Siempre me han interesado las personas inteligentes. -esto incomodó un poco a Fuutarou, pero para evitar problemas, lo dejó ir- Aun siendo inteligente, no eres para nada egocéntrico. Detesto a ese tipo de gente que piensa que por sacar buenas calificaciones son dioses sentados en el monte Olimpo, y detesto más a la gente que apoya a esos proclamados "dioses".

Fuutarou: ¿Qué clase de idiota se alargaría por sus notas? ¿Acaso tienes un amigo que hace ese tipo de estupideces?...

Nino: ¿Acaso no lo conoces? Tú sabes, a tu primo y... ¿eh? Un momento, ¿puedes dejarme ver tu rostro? - acercándose velozmente sin despegar sus ojos de la cara de Fuutarou, empezando a acercar su mano a su cabeza. Fuutarou empezó a sudar del miedo al pensar que habían descubierto su secreto. Todo se calmó cuando en su frente sintió que le habían puesto algo, y ya está, tenías una cortada en tu frente. No puedo permitir que alguien tan especial tenga alguna herida en su rostro. - Desde el bosque se empezó a oír un ruido algo extraño, pero pasaba desapercibido por el sonido natural del bosque.