Evan Peters | One Shots

X (James Patrick March)

Era aniversario de mi y James estar aquí encerrada hacía que quisiera hacer algo nuevo en este día lastimosamente no podemos salir y en halloween James tiene su cena "la noche del diablo" es algo agobiante permacer por el resto de tus días atada en un hotel, pero James lo hacía menos agobiante

- Querida ya has pensado que ponerte para ests noche?- dijo para tomarme por atrás mientras pasaba sus brazos rodeandome

- Recuerda que es nuestra noche...-susurro en mi oído

- Ya quiero tenerte- habló bajo

- Me tienes aquí-

Dejó una serie de besos en el agujero de mi cuello conectado a mi hombros eran besos húmedos sus labios sonaban chocar contra mi piel que se erizada ante su tacto

- James tenemos suficiente tiempo- susurre

- Lo sé, lo sé, pero no me puedo resistir ante tus encantos -

- Ve a listandote, quiero ver a mi hombre más guapo de lo usual- lo tome e la corbata acercándolo a mi rostro él entre abrió los labios esperando un beso porte mía yo también lo deseaba, pero quería que la noche se más emocionante.

- Salgo enseguida- besé al principio de la línea que devidia sus labios el soltó un suspiro

- No tardes...-
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La mesa larga con velas iluminando al rededor y un James parado frente mío con una sonrisa amplia

- Te dije que no tardaria- hablé

- Lo sentí más eterno que mis días aquí- rio

Me miró y me extendió la silla para que me sentase

- Señora Evers- llamó

Enseguida vino trayendo consigo la cena de hoy la señora Everes se paro a lado de nosotros atenta ante lo que haríamos

- Privacidad porfavor Señora Evers-

- Disculpeme- señor March- dijo par a voltear a verme de pies a cabeza y luego marcharse

Sabía bien que no le caía del todo a ella, de hecho en no le caía en nada y las razones ya las sabia Liz me había comentado algo un amor platicó hacía su jefe, claro él ahora mi amante y hombre

- Brindemos querida, por nostros- levanto su copa

- Por nostros repetí yo- le sonreí

El haber tomado la decisión de quedarme aquí fue duro, pero el estar con él hacía que valiera la pena quizá si nos hubiéramos conocido de manera distinta y de una época igual esto habría sido diferente, sentía que él me observa me sonreía como aquel día que lo conocí ese bigote suyo me ponía de una manera que ni yo misma entendía.
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Él me besaba desesperadamente como si ese besos dependiera de nuestro existir sentí como llevó sus manos a mi parte baja como masajeo sin descaro mis múslos subiéndo lentamente a mis glúteos dado un apretón a ésto haciéndome sobresaltar y sacar un quejido

- Ooh James- musité en suspiros

- Necesito hacerte el amor...-

Sus manos se llevaron a lo largo de mi cuerpo quedarse a orillas tomo parte de la preda del vestido estirándola haciendo que mi cuerpo se liberará desnuda ante él con solo mi prenda intima sus ojos se tornaron en un color oscuro al verme ahí completamente expuesta y lista para él, sin embargo mis ojos vieron aquel lindo vestido ya roto

Él me miro con una sonrisa burlona

Se acercó con desepero a mis labios atancandolos por completo sus labios buscaban el domino de los míos sus manos me tocaban recorriendo tomo mi ser junto a esa electricidad inexplicable que llegué a sentir cuando estaba viva él me volvía a la vida de alguna forma

Sus dedos llegaron a mi parte intima y se rosaban de abajo hacía arriba sucesivamennte creando una fricción exquisita, exitante no pudiendo evitar soñido alguno que salían de mis labios la habitación era llenada de jadeos y suspiros míos entonces sentí sus dedos en mi interior fue cuando mi espalda se arqueo y gemí

No tarde mucho en tenerlo entre mis piernas ya ahora sin prenda alguna rosando su bulto en mi entrada me volvía loca me desesperaba por tenerlo en un ágil movimiento me despojo de mi última prenda y entro en mí me lleganaba por completo, rogaban mis pardes más contacto con su erecto miembro esa fricción que ovacionaba hacía que provocara en mi un cosquilleo en mi bajo vientre una inquietud de que se moviese más rápido, más ágil, más duro moví mis caderas presionandolas contra él haciendo que entrase más en mí

- No desesperes cariño... tenemos toda la vida- dijo agitado– todas las noches para hacerte mía...- susurro en mi oído con una vos algo ronca

No basto para mí subí arriba de él tan solo ese movimiento basto para tenerlo por completo en mí me balanceaba de adelante hacía atrás su punta chocaba mi centro en ese punto sensible que me motivaba a seguir a un ritmo más rápido veía sus rostro que se retorcía del placer sus manos subieron a mis caderas las presionó fuerte sentí su agarre quemar parte mi piel no me importo y seguí con lo míos mis cavidades los presionaban cada vez más significando que pronto llegaríamos al órgasmo, él se levantó y con una de sus manos tomó mi rostro y lo hundió en un beso ardiente ahogando nuestros últimos gemidos

- Feliz aniversario- suspiré para rendirme agitada en su pecho

- Espero más aniversarios- para poder terminar el día así- jadeo él con cansancio

- Tú lo dijiste, tenemos todas noches para nosotros- musite para depositar un pequeño beso en sus labios

Amaba a mi hombre.