Twenty-Four: The Plan pt.2

152 27 7
                                    

Para cuando la noche llegó el caballete, el liezo y los pinceles ya estaban bien guardados en su estudio y Garden habia vuelto a su habitacion en brazos de su niñera. Argentina, mientras tanto se sentía conforme e incomodo al mismo tiempo, aquel momento en el jardin lo habia dejado mas desconsertado de lo  que pensó en el instante.

Sentado en el comienzo de la escalera, para cuando las muchachas habían marchado cada una a su casa , comiendo una manzana que  saco de la cocina, no tenia especial hambre, despues de abrirse sentimentalmente durante la tarde hasta sentirse tonto por tanto llorar.  

_____ que vergüenza ____ susurró para si mismo en un momento el albiceleste, realmente le avergonzada bastantes ser cincero o llorar frente a alguien. Cuando era un  niño pequeño incluso  solía esconderse para que nadie lo viera chillar.

Tras ese momento a solas  no habia cruzado mas palabras con el estadounidense, lo que le provocaba dudas, no había tenido el valor de preguntar si podría ver a su bebé otra vez. El mascar de su boca se detuvo para suspirar pensativo, quizás hoy el rubio había sido flexible pero ¿que le aseguraba,que en cuanto la mañana del día siguiente llegara todo volviera a no  ser igual?.

Comenzó a mover uno de sus pies, golpeteandolo en movimientos rápidos de inquietud:

"_______ ¿que lo ablandó? ______"  se preguntó internamente, buscando la respuesta.

Varias cosas se hicieron eco en su mente al mismo tiempo. Podría haber sido aquel momento en la bañera, el que no había sido para nada amable era suficiente para hacerlo sentir culpable, si, era muy probable que fuera por lo que le hizo la noche anterior.

Levantandose de las escaleras decidió ir hasta el segundo piso, aún llevando la ropa de la tarde. Abrió la puerta del estudio de su jefe entrando con cuidado, se suponía que a esa hora se ponía a trabajar más concentrado, aunque eran pocas las veces que lo hacía durante la noche era sabido que cuando tenía las libretas blancas  fuera del cuarto estaba pintando.

El entorno suavemente iluminado del azul plácido de la noche le daba a la habitación una sensación de tranquilidad, no veía a tal hombre en el lugar pero su el lienzo postrado sobre caballete armado, cubierto por una tela blanca. Argentina entonces, se acercó al objeto, quería ver como estaba quedando, no obstante, la luz amarillenta por debajo de la puerta lateral del estudio le llamó la atención.

La habitación de al lado era justo la del estadounidense por lo que si tenis las luces encendidas este aún estaba despierto. Dejando de lado su curiosidad por la pintura se dirigió hasta la puerta silencioso, apoyando su cabeza en la madera para escuchar del otro lado. El silencio perpetuo le dió carta ancha para girar la perilla e ingresar al cuarto.
Al entrar no se encontró con el rubio pero el sonido del agua en la habitación contigua y el vapor saliendo de la puerta a medio cerrara  (que era el baño) le dió la pista de que este estaba bañándose.

La cama estaba desacomodada,mullida, pareciese el nido suave de mi conejo, avisándole que antes de su llegada el más alto.estuviera descansando. Un fuerte deseo se coló entre sus pensamientos, ver las sábanas tan blancas y desparramadas, le hizo pensar en lo suaves que serían.

En un impulso se rescostó sobre la cama, comenzando a moverse entre las telas suaves al tacto, despues de quitarse los zapatos. Dusfrutando de la calidez  y de lo tán blanda que era  en comparación a la que él tenía. También se sintió encantado con el perfume varonil que desprendían las sabanas, uno seductor, tan característico de la colonia que veía sobre la cómoda y que se mezclaba con el olor natural del hombre más grande de la casa.

Al mover sus brazos también dejaba impregnado suave olor, aún si no era muy destacable para un hombre tan quisquilloso y detallista como lo era estadounidense era suficiente como para dejarle claro que estuvo ahí.

Give Me Back My Baby - Usarg [Editando] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora