𝕋𝕒𝕤𝕥𝕖│ꜱᴛʀᴀʏ ᴋɪᴅꜱ ᴛʀᴀᴅᴜᴄᴄɪᴏɴᴇꜱ│ˢᵐᵘᵗ ﹆﹆

Minho

un brazo envolvió tu cuerpo, descansando alrededor de tu cintura. Acampar con  Minho  y sus miembros te pareció extremadamente terapéutico.

El sol ya se había puesto y todos habían visto cómo se hundía en el suelo. lo que realmente estabas esperando eran las estrellas brillantes que se esparcirían por el cielo.

descubriste tu pasión por observar las estrellas por primera vez cuando tu dulce novio te llevó a salir durante la medianoche, para que ambos pudieran admirar el brillo en el cielo; no estabas seguro si mirar las estrellas que se desviaban por el cielo o la estrella que brillaba justo a tu lado.

Admirando los destellos, escuchas cómo se arrastran los pies junto a tus cuerpos y los de Minho, tu cabeza se inclina para ver a Seungmin y Jeongin dirigiéndose hacia su tienda.

"¡me voy a la cama!" Declaró Seungmin, sus labios formaron una ligera sonrisa cuando vio a Jeongin seguirlo. Todos dan las buenas noches a los dos niños más pequeños y tus ojos se encuentran con una estrella en particular.

"¿Quieres regresar a la tienda también?" Minho preguntó, en voz baja y melosa. simplemente asientes, sonriendo de la misma manera que él. "¡Minho y yo también nos vamos!" anuncias, ambos son rápidos con los pies, las manos y los dedos entrelazados.

"¡buenas noches!" exclama, despidiéndose de todos con la mano mientras les dan las buenas noches a ambos.

te arrastra a tu tienda compartida y ambos se acuestan sobre la manta que cubría sus costados.

Minho te abraza mientras pasa suavemente sus manos por tu cabello. Sientes que tus párpados se agitan, a punto de cerrarse, hasta que sientes un tirón en tu cuero cabelludo.

gimes, tus dientes se clavan en tu labio inferior para sofocar cualquier otro sonido que pueda escapar. Tus caderas se rozan contra las suyas, sintiendo el bulto reprimido en sus pantalones empujar contra tu trasero.

"¿Qué esta mal, bebé? Me estás moliendo encima. —bromea, susurrándote al oído. "m-min..." intentas encontrar las palabras, pero tu lengua se queda corta y, en lugar de eso, suelta un gemido entrecortado mientras él golpea tu espalda con más fuerza.

"¿El gato te comió la lengua?" Se burla, deteniendo sus movimientos para dejarte respirar.

"Sí, tú ". escupiste, jadeando pesadamente por la estimulación. Tu cabeza gira hacia Minho, quien ahora se ha sentado. te giras para recostarte boca arriba.

levanta una ceja, sus ojos entrecerrados y oscuros. Se burla, poniendo los ojos en blanco. “No seas mocoso”, gruñó. "Tú y yo sabemos que solo yo puedo hacerte sentir bien".

Tenía razón, pero de ninguna manera ibas a admitirlo. "Sí, claro, lo deseas". Respondes, ignorando la humedad que mojó tus bragas de algodón.

Su mano rodea tu cuello y la otra baja para golpearte en la cara. Haces una mueca, con la boca abierta y el coño palpitando. él te levanta, con los dedos apretados alrededor de tu cuello, restringiendo el flujo de aire.

Su mirada está fija en ti, haciéndote sentir más pequeño de lo que ya eres. su lengua se toca la mejilla. Tu visión está borrosa por la falta de aire; sus dedos finalmente abandonan tu cuello para agarrar tu mandíbula.

"Crees que eres mejor que yo, ¿eh?" pregunta, tus ojos se fijan en los suyos.

"sabes quién soy." murmuras, una sonrisa formándose en tus labios. No estabas seguro de dónde estabas obteniendo esa confianza, pero se sentía bien finalmente poner a Minho en su lugar por una vez.

Él se ríe, liberándote de su agarre. "entonces muestrame."

Tienes los ojos muy abiertos y él arquea una ceja. "¿qué? ¿Quieres que te lo repita? Se burla, con una sonrisa tirando de la comisura de su labio.