calma ante el ego hecho pedazos

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La caótica o desastrosa (como se le quiera decir) pelea de todoroki e izuku había acabado y en el momento el Albino estaba a lado de izuku en la enfermería curando lo que podía de sus heridas que no era demasiado, sus habilidades de curación no eran las mejores todavía pero eran mínimamente decentes como para ayudar en algo.

Si bien el de cabello blanco se notaba tan animado como siempre había algo pasando por su mente, había visto y escuchado toda la pelea quería hablar con todoroki... Sabía de primera mano la sensación de no quererse parecer a alguien por algo que este haya hecho aunque eso no es algo que hiria a compartir en voz alta... Después de todo ya más o menos lo supero o bueno esta en proceso de.

Había escuchado no sólo por los gritos de pelea también por lo que le contó izuku que estaba medio dormido en camilla cuando despertó y lo primero que pregunto era como estaba todoroki, sans se preguntaba cómo es que aquel peli-verde podía ser tan amable porque genuinamente no le hayaba sentido racional, se mantuvieron hablando de eso un rato y eso término de llamar la curiosidad del Albino que no sólo sentia interés por el de cabello bicolor, se sentia identificado con el en cierta medida y eso le hacía sentir unas irracionales ganas de ayudarle, tal vez era ese pensamiento de querer decirle lo que a el le hubiera gustado escuchar hace años o tal vez algo más, sans no quizo cuestionarselo demasiado por bien propio, no queria recordar lo que sentio en ese tiempo porque no le gustaba para nada hacerlo lo cual tiene sentido sabiendo el mismo todo lo que pasó en dado momento.

Finalmente habia un intermedio de descanso, que los participantes recobraran energías y Cementos pudiera reparar la arena un poco, habia quedado en un Estado deplorable después de la pelea con todoroki e izuku y sans estaba dormido obviamente, o eso podría parecer, realmente no estaba dormido estaba pretendiendo estarlo porque quería pensar mejor y las personas al rededor suyo tendían a hacer más silencio si estaba dormido lo que le ayudaba a alinear sus pensamientos, todavía no sabía que quería hacer con respecto a cierto rubio con problemas de ira.

Si quería destruirle el creciente ego eso no se lo negaría a nadie, ese era el punto de todo, bajar de su pedestal de oro a katsuki para ver si así deja de ser tan agresivo con toda persona que se le acerque pero ¿como hacerlo? No sabía cómo darle ese golpe de realidad sin causar... Demasiados daños colaterales como el prefiere mencionarlos para no ser tan explícitos en a que se refiere con eso, después de minutos más de pensar llegó a cierta conclusión y esperaba eso funcionará porque si no seguramente se tendría que poner más serio con eso.

Por otro lado, Katsuki estaba nervioso, entendible, normal, pero se negaba a aceptarlo a cualquiera que le preguntara porque implicaba aceptar algo, le tenía miedo al Albino, si así de simple, le tenía miedo, no sabe cómo luchar contra el, no sabe que tan fuerte es, Uraraka ni lo llegó a rozar ¿el de verdad era capaz de hacerle al menos un rasguño al Albino? No lo sabía... Eso en sus entrañas le aterraba se sentía como luchar contra algo invisible, no lo podía ver, no podía saber si le había daño o no. No le iba a decir a nadie que tenía miedo, estaba intentando sudar lo más que pudiera para aumentar sus probabilidades de ganar, su poder dependía del sudor después de todo y mientras más cantidad de eso tuviera, más potentes serían sus ataques.

Finalmente la espera acabo, ahora iban a combatir el Albino y el Rubió ambos cada uno en su extremo de la arena esperando que present Mic terminara de presentarlos y de animar a la multitud que ahora estaba gritando ansiosa por el combate

—bien, te daré ventaja... Tienes el primer turno bakugou

Soltó el oji-celeste con un tono más serio del habitual, nadie lo había escuchado así aparte de aizawa alguna vez así que sus compañeros sintieron escalofríos, aquel bromista cuando quería era extraña e inquietantemente intimidante

heroe no-humano(Sans en bnha) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora