La Pesadilla

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Katerina se encontraba tirada en el suelo, sangraba demasiado como para poder moverse, su respiración era entrecortada y casi no podia hablar y mucho menos gritar para pedir ayuda.

La puerta se abrio dejando ver un sombra, una mujer, una cazadora, se arrodillo frente a ella y tomo su mentón para que la mirara. Esos ojos los conocia muy bien como para no saber quien era, ella le hablaba pero Katerina no la escuchaba, no podia, sus oidos sangraban un poco por los golpes.

-¿Me estas eschuchando niña?- le pregunto

Katerina no podia emitir un sonido más que de dolor.

-No...- tomó fuerza para hablar -No soy una niña- dijo

La mujer empezó a reir dando a entender que no era sierto. Solto su mentón dejando caer su cabeza al frio suelo.

-Eso ya lo veremos- dijo

Saco una daga de su bolsillo y miro a la chica.

-No espera, no porfavor- suplico -Porfavor no-

La mujer se acercó a ella con malicia sin importarle cuanto la habia lastimado ya, sin importarle el daño que le estaba haciendo, Katerina la miraba con pavor, con miedo, lloraba y gritaba con desesperación pero nadie podia salvarla, no de ella.

-Veras mi linda Piel de Dragón, te lo adverti y no me escuchaste, ahora disfruta de las consecuencias- dijo riendo

-NO NO NOOO, ESPERA-

Katerina despertó gritando y sudando como loca, habia sido un sueño nada más, una pesadilla una que era frecuente. Se sento en la cama pasando su mano por su pelo, otra vez esa estupida pesadilla, no habia una noche en donde no la tuviera.

Se levantó de la cama y camino hasta el espejo de cuerpo completo que habia en la habitación, se quito el camison con el que dormia y vio su cuerpo lleno de cicatrices, esas horribles cicatrices, las que le hacian recordar esas semanas.

Miro su espalda y toco las cicatrices de sus hombros y abdomen, solto unas lagrimas y volvio a vestirse con el camison. Salió de la habitación para ir a la cocina por un vaso de agua, trataba de no pensar en lo que le paso pero le era imposible, hace dias que estaba con Los Sombrero de Paja y nada habia cambiado, penso que talvez estando con ellos todo seria diferente, penso que no tendria más pesadillas pero no era asi.

-¿Vas a la cocina?-

Paro su paso para ver quien le habia hablado, cuando giro vio una cabellera verde acercandose a ella, claro que tenia que ser él, carajo, ¿por que él?.

La chica notó como el hombre estaba refregandose los ojos, recién se despertaba, tal vez ella lo despertó con su grito.

-Si, voy por vaso de agua- dijo volviendo a caminar

-Perfecto, yo voy por algo del bar- dijo el chico alcanzandola

Katerina no quería mirarlo pero no podia evitar verlo de reojo, como rara vez estaba sin su katana y su pelo estaba algo despeinado, se veía muy bien asi.

Pero que estaba pensando, dios no, es Zoro, él la estaba cazando cuando se conocieron por algo sabia tanto de ella, tal vez el sabía más de lo que ella queria.

Llegaron a la cocina y Katerina fue directo a buscar su vaso de agua, trato de ser rápida para volver a su habitación y tratar de dormir como una persona normal pero Zoro era más rápido.

-Y ahora a dónde vas?- dijo sirviendose un poco de cerveza

-A mi habitación- le respondio la chica saliendo de la cocina

Zoro quería preguntarle por sus cicatrices pero no sabia como iba a reaccionar, cuando toco su espalda ese dia ella no reacciono de la mejor manera.

Hasta que recordo que hace dos dias Sanji habia preparado helado y conociendo a Katerina sabíalo que le gustaria.

Con Piel de Dragon (Roronoa Zoro)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora