||1 Mes|| -MIKEXE-

-20-

Ambos caminaron hacia la puerta de la salida para detenerse, aquel pequeño había visto sin duda a un gran amigo.

-¡Silvio! ¿Eres tu?

-¿Mikecrack?

Ambos al darse cuenta de lo ocurrido sin dudarlo se fueron a abrazar, lo que lleno de lo que parecía ¿Celos? Al mayor.

-¡Y cuéntame Silvio! ¿Que te trae por aquí a Andorra?-Preguntaba el pequeño rubio.-

-¡Quiero que mi pequeño Mateito conozca más países!

-¿Trajiste a Mateo?

El castaño asintio con la cabeza.

Mateo era el segundo hijo de Silvio, el pequeño tenía tan solo 2 años... Mientras que su hijo mayor tenía 10, era hijo que provenía de un accidente con su amigo Music.

Una hermosa mujer apareció detrás del mexicano, con el pequeño Mateo en brazos.

-¡Mira quién te extraña Mike!-Decia la castaña, la cual se hacía llamar Linda, Lin para los amigos.-

El pequeño Mike no dudo en abrazar al hijo de estos para después mirar al exe a los ojos.

-¡Los bebés son tan hermosos! Claro... Cuando no lloran por qué dan mucha lata.-Dijo para después soltar una dulce risa.- ¿Quieres cargarlo?

-No gracias...

Estos amigos estuvieron platicando un gran rato, Mike sin dudarlo les paso su dirección para que fueran a visitarlo, después de todo Silvio y su familia estarían en Andorra un mes.

El exe se acercó al mexicano para susurrarle algo al oído, este solo soltó una pequeña risa para después el exe salir del restaurante.

-¿A dónde va exe?-Pregunto el rubio.-

-Fue a comprar algunas cosas... No tardara, 15 minutos y no más según el.-Le contesto el mexicano.-

El pequeño solo agachó las orejas, no le gustaba que este se fuera de su lado, pero su ánimo fue levantado por el hijo mayor de Silvio. Este llevaba el nombre de Saiko, tal nombre provenía de su "madre" Music. El cuál se lo puso por historias japonesas, si algo ama su Madre es leer.

-¡Tío Mike!-Exclamo el pequeño, consideraba a Mike como un Tío.-

-¡Hola pequeño! Hace mucho que no te veo, mírate nada más... Ya eres todo un caballero jsjsjs, te prometo que después de que Tío Mike arregle unos problemitas te llevaré a los mejores centros comerciales, ¡Y tiendas de videojuegos!

-¡Siii! Me voy a portar bien Tío Mike, ¡Pero por favor arregla tus problemas rápido!

-Saiko debes tener paciencia...-Decia el mexicano.-No sabemos que tan grandes sean los problemas de Mike.

Aquel pequeño empezó a mover su colita en señal de desesperación, se estaba imaginando que exe le había contado todo, por lo que decidió hablar.

-¿Ya lo sabes...?

-¿Saber que?-Pregunto confundido el mexicano.- ¿Hay algo que quieras decirme?

-¡No, no, no!-Dijo algo desesperado el rubio.-

-Exe dijo que fue a arreglar unas cosas.. con Timbalosky.

-¿Timbalosky? Hmm... Después le preguntaré.-Decia algo confundido, ¿Para que quería exe ir con Losky?-

El pequeño Mike poco a poco fue relajando los movimientos/tics que hacía con su colita, haciendo plática con los que estaba. Después de todo olvidaba las cosas fácil.

Exactamente 15 minutos después, el mayor llegó, Mike lo miro con una gran sonrisa, los cuatro amigos y los dos pequeños se despidieron.

En camino a casa no hubo ni una palabra... Todo era silencio... Al llegar Mike lo primero que hizo fue tomar la formula para regresar a ser un cachorro, lo mismo exe.
Después de que hiciera su efecto Mike se dirigió con el exe y decidió romper aquel silencio... Tan incómodo.

-¿Por qué fuiste con Losky, exe?-Pregunto el can-

-Eso a ti no te importa... Ahora. ¿Por qué no vas a ver tus caricaturas? Estoy ocupado.-Fue la respuesta que le dió el mayor, que tenía algo oculto.-

El can rubio que estaba por primera vez agotado solo asintio con su cabeza y se dirigió a su pequeña mesita donde dibujaba.

-Mañana tengo que aclarar todo con exe... ¿Que se supone que le diga? Que solo lo amo... ¡Y ya está! Nada más...-Pensaba.- No sé mucho del amor... Excepto mi última declaración que fue con Flex... Pero si está vez sale algo mal juro que no vuelvo a amar en mi vida.-Continuaba pensando, fruncido el ceño.- Después de todo... Solo seré sincero con el, nada tiene que salir mal mañana ¿Verdad?

Decio dejar de pensar para ponerse a dibujar, por otro lado el exe estaba haciendo "algo."
El cuál se le podia notar que no tenía una buena actitud. Estaba frustrado.

-¡Es la última vez que hago esto! Todo por ese canijo perro...-Decia en voz baja.- Mañana le daré esto a Mike... Pero no sé... ¿Y si no le gusta? ¡A la mierda! No me debería preocupar si le gusta o no... Me da igual.

Ambos estaban haciendo sus cosas hasta caer la noche. Exe decidió salir al patio... Pero... Mike no estaba, estaba realmente ansioso por mañana.

Al sentirse solo fue a su cuarto al verlo.

-¿Te sientes bien, Mike?

-¡S-si! ¿Por qué no estarlo?-Dijo el can rubio, que se le podía notar los nervios.-

-Entonces te dejo descansar... Nos vemos mañana.

El can rubio solo asintio con la cabeza.

Eran al rededor de las 4am cuando el can rubio se paró de su cama para ir a la cocina...

-Son las 4:37am... ¿Desde cuándo me lavanto temprano? Estoy demasiado nervioso...-Decia en voz baja, no se podía ni escuchar aquella voz... Era baja y temblorosa.-

Este estaba en un labor de tomarse un vaso con agua, hasta sentir una mano agarrarlo, no evitaría pegar un pequeño grito.
Pero si de algo estaba seguro, ese no era exe...