94- Un enigma

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Los ojos helados de Itsuki se posaron en las secuelas de la batalla. Nunca bajó la cabeza, solo sus ojos antes de que se volvieran hacia las partes más profundas de la mansión.

La hermosa mansión original ahora estaba rodeada de muerte y batalla.

Cuerpos cubrían el camino de Itsuki mientras Itsuki se dirigía hacia el centro, observando lentamente su entorno. Sus ojos permanecieron nerviosos ante la vista, buscando sobrevivientes.

Sin embargo, no había ninguno, parecia que el Onmitsukido había hecho un buen trabajo. Con un gesto de satisfacción, una explosión llamó su atención.

Mirando hacia la dirección de la explosión, sintió que Soi Fon, Yoruichi, Ukitake y Shunsui atacaban la herrería de Kasumioji. Volviendo a prestar atención, desapareció de su posición y llegó al centro de la mansión.

En el camino, notó que al asesino Bakkoto le faltaban los ojos. Mientras la hoja todavia estaba allí, el núcleo del Bakkoto, su ojo, no se encontraba por ninguna parte. Acercándose, sintió un par de reiatsu delante mientras esquivaba una vez más el lugar.

Cuando llegó al lugar, parecía que los acontecimientos aquí ya habían ocurrido. Un hombre anciano, muy arrugado pero con aspecto de mono yacía en un charco de sangre mientras Rurichiyo no aparecía por ningún lado.

Ichigo tampoco estaba aquí, dejando solo a Rukia y un niño, que Itsuki supuso que era Kannogi Shu. Llevaba un kimono blanco de gran tamaño con un chaleco azul encima.

Su color marrón estaba desordenado, mientras que sus ojos grises expresaban preocupación con indicios de depresión. En general, él estaba en un estado de angustia, mientras que Rukia tenía alegría en su rostro cuando vio a Itsuki

Al escuchar los eventos de Rukia, Itsuki escuchó en silencio y fingió que era la primera vez que escuchaba esto.

Bueno, no fue precisamente difícil para él hacerlo. Sólo un levantamiento de ceja pareció hacer el trabajo. Por alguna razón, a pesar de ver que la situación parecía urgente, Itsuki se tomó su tiempo con todo este calvario.

Escuchó cómo llegó aquí y cómo el hombre muerto que yacía en el suelo estaba orquestando toda la conspiración, pero en realidad era Amagai Shusuke quien movía los hilos.

En una ubicación diferente, Amagai acababa de aterrizar en el cuartel general de la 1ª división y se enfrentaba a Yamamoto. Una mirada tranquila cubrió su rostro mientras el odio llenaba sus ojos y su reiatsu había comenzado a aumentar lentamente.

Rurichiyo estaba junto a él de rodillas con las manos atadas a la espalda. Observó a dos individuos monstruosos enfrentarse.

"Nunca pensaste que habia personas en la sociedad de almas que te matarían si tuvieran la oportunidad".

"¿Matarme? ¿Hasta qué punto?"

"Kisaragi Shin'etsu."

Estas palabras parecieron silenciar a Yamamoto antes de responder en un tono como si estuviera recordando:

"Kisaragi... "

"Sé que no lo has olvidado; ¡he venido en su lugar para quitarte la vida!"

Amagai parecía irritarse más cuanto más hablaba. Acababa de ponerse en posición y se preparaba para desenvainar su espada cuando una voz destruyó la atmósfera del enfrentamiento.

"Florece con locura, Benishidare!"

Una niebla rosada cubrió el área mientras flores comenzaban a emerger de la espada de Kenryu. Aún así, Amagai parecía imperturbable.

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