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imagina:
últimamente tu esposo está consumido por su trabajo y casi nunca está en casa contigo.
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Eran las 2 de la madrugada y Levi acababa de llegar del trabajo con el rostro cansado y bolsas bajo los ojos. Su cabello negro estaba un poco desordenado, su camisa estaba arrugada y su corbata también estaba suelta.
Cuando entró a la casa y miró hacia la sala de estar, inmediatamente se sintió irritado porque aún no te encontrabas descansando.
- "¿Por qué no estás durmiendo a esta hora? Apaga la televisión y ve a dormir"- caminó hacia ti y te miró a los ojos de una manera fría. -
- "Te estaba esperando..."- dijiste tranquila.-
- "Son las dos de la mañana, ¿qué sigues haciendo aquí? Vete a la cama, rápido.- suspiró con frustración y te miró con severidad. -
- "Solo lo hare, si tu también lo haces."-
- "Sí, prometo que yo también descansaré. Pero ve y duerme primero. Me daré una ducha."- dijo- "Buenas noches"-
Fue a su habitación y cerró la puerta de golpe. Pronto, el sonido de la ducha se escuchó desde su baño.
Luego de un rato, tu esposo ya estaba a tu lado tratando de dormir. Su cabello todavía estaba mojado y había círculos oscuros alrededor de sus ojos. Estaba claramente exhausto.
Le diste una última mirada, no querías molestarlo, así que finalmente te dormiste.
A la mañana siguiente, la alarma sonó y despertó a Levi. Sus pesados párpados se abrieron lentamente mientras se levantaba y caminaba hacia el baño para prepararse para el trabajo. Mientras se miraba en el espejo, todavía tenía círculos oscuros debajo de los ojos y todavía se veían cansados como ayer. Se frotó los ojos, como si no hubiera dormido nada anoche.
Te mira pasar por allí y deja escapar un gran bostezo.
- "Buenos días"- saludaste con una leve sonrisa."-
- "Buenos días, querida."- Levi volvió a frotarse los ojos y suspiro.-
Al notarlo cansado, preguntaste si había dormido bien.
- "No, no pude dormir bien anoche. Pero bueno, hoy tengo trabajo y ya llego tarde. Lo siento, cariño."- te miró mientras la preocupación crecía en sus ojos al verte algo decaída. -"Oye, te ves triste. ¿Estás bien? Cuéntame todo lo que te molesta.-
- "No es nada.."- mentistes - "Solo... prometeme que estarás para la cena"- dijiste.-
- "Sí, estaré en casa para cenar contigo, pero llegaré a casa un poco tarde debido a un trabajo importante hoy"- dijo- "Bien, ahora debo irme o de lo contrario llegaré tarde al trabajo. Nos vemos en la cena, mi amor."-
Se inclinó hacia ti y te dio un beso rápido en la frente y finalmente salió de la casa. Lo miraste preocupado porque parecía más cansado que de costumbre. Solo esperabas que volviera antes como había prometido, solamente querías pasar tiempo con el.
En la noche, escuchaste que la puerta se abría y pronto tu esposo entró. Parecía muy cansado y frustrado.
Te miró y suspiró, era evidente que había tenido un día duro en el trabajo.
-"Hola cariño, estoy en casa y lamento haber llegado tarde. Fue un trabajo duro lidiar con algunas cosas importantes."- dijo antes de depositar un suave beso en tu frente.-
- "No te preocupes, me alegra que ya estés aquí. La cena ya está lista "- sonreíste-
-" Gracias, querida. Sé que he estado ocupado con el trabajo todos los días y no he pasado demasiado tiempo contigo, lo siento"-
Se frotó un poco los ojos y se quitó la chaqueta. Su cabello todavía estaba desordenado y todavía llevaba puesto su traje. Caminó hacia ti y te besó en la mejilla.
- "Vamos a cenar, me muero de hambre en este momento."-
Caminó hacia la mesa del comedor y se sentó en la silla, estirando las piernas.
- "Qué tal el día, cariño?"- te miró mientras cenaba. Mientras comía, poco a poco recuperaba su energía y sus ojos se veían menos pesados y cansados. Los dos empezaron una armoniosa conversación.
Al terminar, Levi se levantó de la silla y puso los platos sucios en el fregadero. Caminó hacia ti y te abrazó por detrás.
- "Gracias por preparar la cena. Realmente lo disfruté mientras lo comía."- te besó en la mejilla y te abrazó con fuerza- "Sabes, siempre tengo suerte de tenerte a mi lado. Eres lo mejor que me ha pasado."-
Apoyó su barbilla en tu cabeza y te rodeó con sus brazos. Te miró con una sonrisa cariñosa.
Ya era algo tarde y sugeriste ir a descansar. Asintió lentamente y te besó en la mejilla en respuesta.
Caminaron hacia el dormitorio y el se quitó la ropa. Después de unos minutos, se metió dentro de la cama y se giró para mirarte. Luego puso su brazo sobre ti, acercándote más.
- "Ven aquí, puedes apoyar tu cabeza en mi pecho."-
Empezó a acariciarte la cabeza como si fueras un niño. Luego apagó las luces y se acostó en la cama, acercándote más para que lo estuvieras acariciando.
Estabas feliz, habías tenido una tranquila cena con tu esposo luego de un gran tiempo y lo veías de buen humor.
Lo miraste tiernamente. Te acercaste para darle un corto beso y desearle las buenas noches.
- "Te amo"- susurrastes.-
El te abrazó con fuerza, manteniéndote cerca de él.
- "Yo también te amo. Descansa ahora, cariño"-
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