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modern au¡!
━ Aclaraciones: en este one shot, el oc femenino tendrá nombre.
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Armin se dirigió a la biblioteca de la escuela, como habitualmente solía hacer.
Al llegar, saludo educadamente a la señora Brown, la secretaría, quien era muy amable y querida por todos y siempre trataba de ayudarlo. Escogió un libro y fue a sentarse.
Ya acomodado, se dispuso a buscar con la mirada a una persona en particular. Pero no tuvo éxito, la biblioteca estaba llena de estudiantes, seguramente por qué se acercaba la época de exámenes. Fue extrañó para el chico, la muchacha que esperaba nunca faltaba.
Suspiró y finalmente se concentro en su lectura.
Luego de unos minutos, levanto la cabeza al sentir que alguien se había sentando al frente suyo. Al ver de quién se trataba, su cara se enrojeció, como si lo hubieran atrapado haciendo algo malo.
La joven, que parecía de su misma edad, se encontraba concentrada en su libro, mientras sostenía su cabeza con sus manos.
Inconscientemente, Armin se ahogó con su propia saliva, ocasionándole una fuerte tos.
Eso llama la atención de la muchacha. Armin la mira con una mirada de culpa y vergüenza en su rostro. No tiene nada que decir, solo la mira fijamente, esperando algún tipo de reacción de su parte.
— "Ehh…si, estoy bien. Gracias.."— responde rápidamente, como si se sintiera aliviado de poder finalmente liberar algo de esa emoción reprimida.
A pesar de la expresión culpable de Armin, no puede evitar seguir mirándola, esperando ansiosamente que diga algo.
— Te he visto muchas veces, ¿Vienes seguido?— volvió a preguntar la joven,mientras cerraba su libro, tratando de sacar un tema de conversación.
— Si, siempre vengo. Me gusta este lugar.— sintió un poco de rubor en las mejillas, pues nunca se ha dado cuenta de que lo han visto tanto aquí.— Parece…que tú también, ¿cierto?—
— la joven sonrió— Así es, este es un lugar muy tranquilo, siempre vengo a estudiar o simplemente a leer, es el único lugar donde puedo hacerlo tranquila.—
— lo último despertó la curiosidad del muchacho— Oh…¿puedo preguntar por qué?— preguntó algo tímido, lo cual le causó ternura a la chica y simplemente asistió.
— Tengo hermanos pequeños, son muy ruidosos. Si fuera por mi, estaría todo el día leyendo, por eso pasó bastante tiempo aquí. La secretaria siempre dice que está es como mí segunda casa— río.
Armin sonrió. Le había gustado que la chica se abriera y le haya contando una parte de su vida personal.
— Oh, ¡la señora Brown es siempre muy amable! Siempre trata que todos se sientan en casa.— comenté alegre y la chica simplemente le sonrió.
Los dos quedaron en silencio y Armin se volvió un poco avergonzado al darse cuenta de que la ha estado observando, pero no puede evitar volver a mirarla.
La observo por un momento, y luego miró hacia abajo.
— Por cierto, me llamo Armin. Armin Arlert.— se presentó.
— Amelia. Amelia Braun— respondió de la misma manera.
Armin se sorprendió.
—¿Braun? Espera. Reiner Braun— pensó.
— ¿Eres algo de…Reiner Braun?— pregunto curioso—
— Oh sí, es mí primo.—
¿Primo? Armin no lo podía creer.
— Wow…yo..no sabía.— fue lo único que supo decir.— Pero tú..tienes 16, ¿no?— preguntó cauteloso.
Reiner era un año mayor que él. Tenía miedo de que la chica sea del mismo año.
— la chica río— Así es…me imagino que tú también, ¿no es así?—
Armin asintió y bajó la mirada avergonzado.
Por otro lado, Amelia reaccionó inmediatamente. Se le había ocurrido una idea.
— Los de último año organizarán una fiesta este sábado, mí primo es uno de ellos. Van a invitar a todos, conozco algunos de tu curso que irán.— sonrió— Me preguntaba…si tal vez te gustaría ir..—
Armin se sorprendió pero trató de ocultarlo.
— Ehh…claro que sí. No soy mucho de fiestas, pero si tú estás allí…realmente me gustaría…— dijo y al instante se avergonzó aún más. No podía creer que había dicho eso en voz alta.
Noto como la muchacha se sonrojó.
— Claro que lo haré. — recogió sus cosas y se levantó de la mesa.— ¡Invita a tus amigos! Espero verte allí. ¡Nos vemos Armin! — dijo con una gran sonrisa y se fue rápidamente.
— Adiós Amelia...— respondió.
Se quedó en silencio, tratando de procesar todo lo que había pasado.
Por fin había podido hablar con aquella muchacha, quien había resultado ser más agradable de lo que se había imaginado.
Ya no podía aguantar para que sea sábado, para verla en aquella fiesta.
Ahora solo tenía que convencer a Eren y Mikasa de que lo acompañen.
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━ créditos al autor/a del fanart
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