| narra creador |
El británico se levantó al sentir el sol picar en su piel, ya era de día pero no sabía que hora supuso que era temprano, al sentarse vio al comunista zombie durmiendo todo doblado pero con la baba en la boca, se suponía que estaba cómodo? No le dio importancia y se hizo un café en su taza mientras esperaba que se calentara un poco el agua agarro su bajo y tocó unas melodías haciendo que el zombie se levantará y lo viera.
— que lindo bajo, y que bien tocas. -dijo el comunista.-
— si es preciosa, se llama Susan.. - respondió el más bajo.-
El zombie se quedó callado, ponerle nombre a una guitarra? Supuso que era normal, hay mucha gente que le pone nombre a otras cosas y solo se encogió de hombros, hubo un rato de silencio mientras Tom aún tocaba su bajo haciendo que melodías bajas se escuchen, tord se puso se pie y buscó algo de carne, estaba muerto de hambre (rianse XD)
- oye tom, hay algo de comer para mi..? -hablo el comunista con un gruñido.-
El británico señalo carne cruda dentro de una bolsa negra, lo cual tenía algunas moscas volando por alrededor, el zombie sonrió y agarro un poco de carne, el británico guardo algunas cosas y se puso la mochila iba a caminar así que agarro y le puso una Correa al otro más grande
— que soy un perro o que..? - río y miro al más bajo.-
— es para que no te pierdas. - dijo serio y cortante.-
Los chicos empezaron a caminar un rato largo llegando a una casa tanto abandonada? Era rara, tenía un techo de ladrillos y era color amarilla, los dos chicos entraron. La casa estaba algo vacía pero estaba linda, debían encontrar un lugar para dormir unos días y esta casa serviría demasiado.
— me gusta esta casa se ve linda.. -hablo el zombie.-
No hubo repuesta del otro, un silencio incómodo estuvo por un largo tiempo, el más bajo se fue a un lugar se parecía una cocina algo sucia por suerte el sabia ordenar muy bien, luego de horas toda la casa estaba ordenada solo estaban las manchas de sangre que el comunista soltaba por la falta de una pierna, el británico se puso a preparar su propia cena ya que ya estaba por hacerse de noche y el tenía hambre
— oye Tom, tengo hambre.. - dijo el comunista -
el británico miro al comunista y soltó un gruñido, para luego ir y buscar en su mochila una rata muerta, para darsela. Tord aceptó eso y sin pensarlo dos veces devoró a la rata con sus colmillos dejando sangre por toda la mesada sin darse cuenta.
El británico hizo un gruñido molesto el haber limpiado y que ya este sucio de nuevo, tord se dio cuenta y buscó algo para limpiar la sangre que había dejado.
Tom solo se fue en silencio y subió unas escaleras que habia en la casa cuando subió se dio cuenta que había varias habitaciones y fue a entrar a una para poder descansar sin ningún problema sabiendo que tendría que estar al tanto con lo que pasa en la casa o con el zombie que tiene como acompañante.
