Sam lo cuenta todo (segunda parte)

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Espero que Devon aparezca de manera sorpreciba como es su costumbre. Aparecer por las ventanas es su especialidad. De modo que estoy en la cocina tratando de hacer chocolate caliente mientras vigilo expectante la ventana a pocos metros de mi. Si, ella en cualquier momento empujara la ventana con el pie y entrará por ella intentando asustarme, pero ya estoy preparado.

Mientras espero logro oír entre el soplar del viento que algún objeto se cayó. Ella está aquí, me preparo para ver su rostro atravesado de la ventana y me rio sólo de su posible reacción de desilusión al no encontrarme con la guardia baja. Algo sucede. Ya pasaron varios minutos, tenía tiempo de hacer su entrada. Pero no es así, no hay actividad allí afuera.

《Que tal que no aya sido ella, o... que tal que algo le sucedió mientras trataba de entrar? Tal ves se calló intentando trepar por el árbol de mi ventana》

《Dios》

Corro prácticamente hasta mi habitación. La ventana está abierta, y el miedo comienza a materializarse desde el el fondo de mi garganta. Logró ahogar un grito cuando veo que su chaqueta cuelga desde el borde de mi ventana. Me asomo aún más tratando de buscar rastros de ella .

《Dios Devon, donde estas!》

Estoy apunto de saltar de la ventana en su búsqueda, cuando algo empuja mis hombros hacia adentro de la habitación.

-DEVON!!!

-La misma, en carne y hueso.

La veo retorcerse de la risa mientras yo intento recuperar el aliento luego de tal susto.

Me tumbo en el suelo y estrujo mi camiseta en un puño.

Por un momento creí que había caído dos pisos. Maldición no puedo controlar mi corazón aún.

-maldición Devon, no vuelvas a hacer eso nunca.

-fue tu culpa. Cuando llegue te vi en la cocina. Así que tuve que tomar otra forma de entrar.

-creí que estabas herida, por dios.

-Samy caer de un árbol creo que sería de lo último que tendrías que preocuparte.

Me puse de pie y la vi frente a mi con una sonrisa.

《Dios es cierto, está bien》

La escaneo con la mirada.

《Es cierto, ni un rasguño》

Me acercó más a ella y tomo su rostro en mis manos. Su sonrisa de borra casi de inmediato.

-no vuelvas a hacerme eso, nunca.

Sólo me mira con preocupación. A comprendido- que fue una broma pesada y ahora está arrepentida de ello.

-lo siento Samy, no quería preocuparte, sólo fue una broma.

Me tranquilizo al saber que ella está bien, entonces sonrío

-está bien, sólo no vuelvas a hacerlo.¿ Deacuerdo?

Ella asiente.

-no volveré a hacerlo.

-bien,¿que tienes en mente?

Veo sus hermosos ojos azules brillar.

-ya lo verás.

Cuando se voltea puedo notar que trae consigo una mochila.

-¿que traes ahí?

-nada de preguntas. Vamos a tener una aventura de media noche estilo Devon.

Please, don't leave meDonde viven las historias. Descúbrelo ahora