Capítulo 3

907 93 24
                                    

Se quedo parado en el mismo lugar mientras miraba a Kunikida y Atsushi, era verdad, ambos tenían una buena condición física y él no era capaz de subir las escaleras sin perder el aliento.

En su rostro se hizo una mueca de disgusto y salió corriendo tras Yosano que ya estaba nuevamente en su consultorio.

Se sentía ofendido por la táctica de Yosano, ella mas que nadie era consiente de su falta de estabilidad y actividad física.

— Está bien, lo acepto ellos, son mejores en el ámbito físico pero, ¡Puedo entrenar!

— Ni lograras un gran cambio en solo una semana, Ranpo.

— ¡Lo haré!

Exclamó decidido mientras miraba fijamente a su amiga quien solo suspiro aburrida, no se la dejaría fácil y él no tenía planes de rendirse.

— Entrenarme, si alguien es capaz de lograr un cambio radical en mi, ¡Eres tu, Yosano!

Suplico a la joven quien solo rodó los ojos y sonrio burlona, era clara la desesperación en Ranpo y eso la perturba ligeramente, no estaba acostumbrada a que su amigo sintiera interés en esforzarse por alguien que no sea Fukuzawa, el mismo o ella.

— ¿Estas seguro, Ranpo-kun~? No soy una delicada dama por parece

Ante las burlas de la chica, el ojos verde solo contuvo un suspiro y sonrio, Yosano aceptaría entrenarlo, solo necesita tiempo y persuasión.

— Se que no seras amable conmigo por eso eres la persona indicada para esto.

Afirmó con seguridad mientras miraba a la peli morado fijamente.

— Aveces eres una molestia Ranpo.

Se quejo mientras suspiraba cansada, termino aceptando tras unos minutos por lo cansado y molesto que podía llegar a ser Ranpo si no lo complacían en lo que pedía, realmente lamentaba que fuera Dazai quien tenga que soportarlo.

Ranpo ante la afirmativa de su amiga sonrio, sabia que terminaria sedicendo, nadie adoraba su propia paz mas que Akiko Yosano.

Tras el transcurso de las hora Ranpo terminó haciendo distintos trabajo, inició por el papeleo el cual se le hizo fácil, pero tardo por el montón de pilas de papel que tenía acumulados.

Quizás deba conseguirse un Atsushi como Dazai lo hizo.

Lo siguiente fue ordenas el mismo su oficina, Yosano habló con Haruno para que no lo ayude, tardo unas horas, no se le daba bien cuidar de sí mismo o sus cosas.

Yosano no sería amable con él, lo supo desde el primero momento, al ver su sonrisa pero, solo supo que el infierno se había presentado ante él, al ver a Yosano en su puerta a las tres de la madrugada, la chica llevaba ropa deportiva y no espero pues solo arrastro a Ranpo para iniciar una carrera por todo el parque de Yokohama.

— Te estuve llamando desde las dos 

Comentó antes de que Ranpo pudiera siquiera quejarse por ser despertado tan temprano.

— Además, tu me pediste el favor.

Recalco mientras aumentaba la velocidad, dejando a Ranpo atrás, quien apenas y podía mantenerse en pie.

Mientras descansaba apoyado en uno de los bancos del parque, yosano ya había dado cinco vueltas completas al parque.

— Entiendo tu punto Yosano… pero no pienso rendirme con Dazai si eso es lo que esperas lograr con esto.

Termino de decir entre suspiros de cansancio, apenas había iniciado y ya sentía que moriría  pero era Ranpo y a él nadie le ganaba, comprendia el punto de Yosano al decir que el no estaba preparado para lo que implica ser compañero de Dazai.

Dazai necesita a alguien que pelee mientras se ocupa de desactivar corrupción o la habilidad de algún enemigo.

Ranpo quiere ser aquello que Dazai necesita, solo haci Dazai no lo rechazara nuevamente.

Fue sacado de sus pensamientos por la risa de Yosano, al parecer Ranpo habia dado en el clavo.

— Si no eres capaz de seguirme el ritmo no serás útil al lado de Dazai.

Tras terminar de reir cambio su expresión a una más seria, tenía que ser dura con Ranpo, no permitiría que dos de sus compañeros sufran contratiempos en una misión en la cual ella no esté cerca para ayudar

— Pero-

— Si Dazai sale herido de mortalidad no podre curarlo, su habilidad anula la mía, mandarlo contigo seria poner su vida en peligro, de igual forma con tu vida, si no mejoras en lo largo de la semana, seré yo misma quien le diga al presidente que mande a alguien mas con Dazai.

Soltó antes de continuar corriendo, Ranpo aveces actuaba como un niño.

Sus palabras solo dejaron a Ranpo inmóvil en su lugar, pensó en esa posibilidad en distintos momentos, pero siempre encontraba la solución, mentira, nunca la encontraba solo quería auto convencerse que de enfrentarse a una situación similar a la que Yosano planteo, todo saldría bien, pero realmente era consiente que no saldría nada bueno de la situación.

Y aunque la situación y las consecuencias serían obvias, comenzó a correr tras Yosano, no permitiría que alguien mas le diga que no podía estar junto a Dazai por que simplemente no eran lo que el otro necesitaba.

Dazai si era lo que Ranpo necesitaba, pero no podía decir lo mismo si fuera al revés.

↬✰ᴄᴀsɪ ᴍɪ ᴛɪᴘᴏ✰↫Donde viven las historias. Descúbrelo ahora