𝗦𝗢𝗙𝗧 𝗦𝗣𝗢𝗧 ━━━ ❝ my dear, my darling, my love. i'm complete with you. ❞
su cálido corazón derritió el de él helado
y descubre que sus mitades forman un todo.
eran el punto débil del otro
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AERA Y SUHO MARCHARON POR LA CONCURRIDA CALLE, balanceándose las manos mientras el aire frío besaba sus mejillas haciendo que se sonrojaran. El sol seguía asomando por encima de un alto edificio y el único calor que irradiaba era el de sus manos entrelazadas.
La pareja atraía las miradas a su paso── como de costumbre. Tal vez ya rozaba el límite de lo molesto, teniendo en cuenta que Aera nunca había estado en una vecindad con mucha gente y que aún se estaba acostumbrando a su nueva vida, pero no podía controlar sus miradas y pensamientos, así que la chica dejó de molestar.
Habían decidido pasar un rato juntos, se habían dado cuenta de que no habían salido mucho desde que empezaron las épocas de exámenes, así que cuando evidentemente terminaron, los dos habían decidido tener una cita mucho más prolongada.
Pero si había algo que se les daba mal a los dos era planificar. . . Cualquier cosa.
Seguro, ellos podrían obtener notas completas en cualquier examen. Seguro, Suho podría jugar cualquier deporte que pronunciaras. Y seguro, Aera podría terminar en la portada de Vogue. ¿Pero planear un itinerario sólido? Ella preferiría correr vueltas alrededor del campo que hacer eso.
Así que allí estaban, caminando sin rumbo y sin saber qué hacer. Aera tenía muchas cosas que quería hacer, y una lista igual de larga de cosas que no podía hacer── culpa de ello a sus pulmones. Pero ahora mismo, su mente estaba en blanco.
—Entonces, ¿tienes algo que quieras hacer? —le preguntó Suho mientras miraban la calle desde un puente.
La chica se animó mientras jugueteaba con los dobladillos de su cardigan, dudó un momento, con los engranajes de su cabeza girando. —La verdad es que no —, respondió, con una pequeña sonrisa en los labios. —Pero mientras pase tiempo contigo, no me importa nada — "
El chico se rió. —Porque yo no paso contigo cada segundo que respiro —, bromeó mientras Aera jadeaba.
—Lee Suho. ¿Acabas de hacer una broma? —Ella puso una delicada mano sobre su corazón. —Oh no, el mundo se debe estar acabando. —Ella rompió en un ataque de risa, su novio sonriendo en gran medida, sus ojos adorándola.
