Omega En Cinta (Minsung)

Capitulo 2

Los meses Pasarón. Para ser exactos tres, tres meses en los que la amistad de jisung y felix creció de sobre manera, ambos se consideraban mejores amigos y se la pasaban todo el tiempo juntos. En el instituto habían varios alfas que querían salir con los omegas, pero ninguno de los dos aceptaba, por que aunque los dos estuvieran solteros ( esto después de que felix haya terminado su relación cuando su novio casi lo obliga a tener sexo con él y el Omega se haya negado), ninguno estaba interesado en una relación.

– Lix, hoy no podré ir a tu casa – dijo jisung mientras metía la cucharada de cereal a su boca.

– Oh, ¿Por que?.

– Tengo que ir con mi ginecólogo, es el chequeo que me hago cada tres meses, tengo la cita para esta tarde.

– Mmm entiendo, ¿te puedo acompañar?.

– Si quieres, pero te advierto que es muy aburrido.

– No me importa sung, solo no quiero llegar aún a casa.

– Me parece bien.

Ambos amigos sonrieron y se dispusieron a terminar sus almuerzos, sería una tarde muy aburrida para ambos pero eso no importaba, si estaban uno con el otro el tiempo alrededor pasaría rápido.

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Lee Minho era un gran empresario, a sus 23 años de edad era dueño de unas de las empresas más grandes del país, convirtiéndolo en el multimillonario más joven del mundo, y en uno de los alfas más codiciados del país. Aunque esto último para muchos era solo un sueño, ya que el guapo alfa ya tenía novia, si, una guapa y joven Omega llamada Minju. Eran una pareja envidiada por unos y respetada por otros. Pero eso es solo lo que la gente ve, nadie sabe los verdaderos problemas de estos.

– Ya te dije que no Minju, deja de insistir – estaba realmente enojado, su novia no dejaba de insistir con el tema y él estaba muy molesto. Dejo su maletín en el escritorio de su oficina y se sentó en su asiento.

– Pero es que no entiendo amor, ¿por que no quieres? – dijo siguiendo a su novio y sentándose en su regazo.

– Por que no y ya, no tengo por que darte una razón – quito a su novia de su regazo y se levantó del asiento, estaba estresado con esta situación.

– Pero... ¿por que lo tomas así?.

– Se trata de mi hijo Minju, mi descendencia. No puedes tomar eso como un juego – camino hasta una de las mesas y se sirvió un vaso de whisky.

– Pero yo soy tu novia, es justo que yo llevé a tu hijo en mi vientre y no una persona que no conoces – se estaba empezando a molestar. Llegó hasta donde estaba su novio y lo abrazo por detrás.

– Lo se Minju, pero hasta que no esté seguro que está todo bien en ti no lo hare. Cuando te hagan los estudios y todo este bien, nos casamos y ahí si te puedes inseminar con mi esperma – soltó poco a poco los brazos que rodeaban su torso y se dio la vuelta. Empezó a caminar hasta el escritorio con el vaso de whisky en sus manos, dejando a una Minju muy enojada e inconforme.

– Bien, creo que lo único que voy a tener de ti es tu maldita esperma por que nisiquiera sexo tenemos – por fin había podido decirlo. Para el mundo eran la pareja perfecta pero la verdad es que no era así. Minho no la tocaba, no la besaba, nisiquiera tenían sexo y eso era frustrante para ella.

– Conoces tu lugar Minju, para el mundo eres mi novia, pero sabés que estoy contigo por mi madre. Lo sabes muy bien – llevo el vaso con la bebida a su boca y dio un gran trago, terminándolo de una sola vez. Puso el vaso en su escritorio.