PARTNERS or RIVALS...

XI

NARRADOR OMNICIENTE

-¡Carajo! -grito el de trenzas.

-Tom tranquilizate.

Bill agarro el sobre que estaba sobre la mesa, abrio este y saco unas fotos de la pelinegra con leves golpes. Mia desaparecio el dia anterior en la noche.

-Tom, si te relajas la encontraremos rapido.

El mayor miro los sobres y se tomo la barbilla pensativo, sabia perfectamente que fue River y tendria un plan para recuperarla.

-¿Que sentiria River si le quito lo mas presiado? -pregunto miranado el ventanal a su derecha.

-¿Tom? -pregunto el menor cauteloso.

-Y...-dijo dandose la vuelta hacia el escritorio. -Si el cargo le cayera...el no soportaria.

-¿Tom que pretendes hacer? -pregunto acercandose un poco a el.

-Destruirlo.

Salio del estudio y se dirigio a la salida, se subio en un auto negro seguido de dos mas, el mayor estaba molesto, preocupado y pensativo.

El telefono de este enpezo a vibrar el telefono del mayor, este al ver tanta insistencia desidio contestar.

-Tom. -una voz carrasposa y gruesa salio del otro lado de la linea, Tom toco el hombro del conductor haciendo que se detuviera de golpe.

-Sabes perfectamente quien soy. -se escucho una risa ironica.

-¿Que quieres? -pregunto mirando a los lados por la ventana del auto.

-Tom...-se rio. -Pequeño insolente, no sabes el daño que causaste....-continuo.

-River, no me importa lo que hagas, no desperdiciare mi tiempo con una niña tonta. -dijo claramente mintiendo.

-De acuerdo, no le hare nada a mi pequeña niña. -dijio con neutralidad. -Pero...¿ella sabe que mataste a su madre?

El color abando el rostro del menor, aterrorizado de que River revele el secreto de este.

-Se lo merecia. ademas tu tambien la querias muerta.

-¿Crees que ella te va a creer? -se rio a carcajadas. -No seas tan credulo, destruire tu negocio, te arruinare.

-¿Como estas tan seguro?. Eres un viejo insignificante. -el de trenzas dijo con desprecio en su voz.

-Por que la tengo a ella. -Y con eso colgo.

Tom se preocupo aun mas al saber que aquel hombre quien despreciaba a su esposa  e hijos la tenga a ella en sus manos.

(...)

Los ojos de la menor se abrieron poco a poco, la luz del dia no dejaban ver con claridad, trato de taparse el rostro pero no lo logro ya que estaba atada a una silla, una risa burlona sono en el lugar, Mia recoconio la risa en un segundo, dandose cuenta que es su padre.

-¡Maldito hijo de puta! -se movio en su lugar como intento de ataque.

-Cuida esa boca mi pequeña. -se acerco lentamente para luego apoyarse en las piernas y quedar a la misma altura de su hija.

-No me jodas. -dijo girando los ojos.

-Mia, vine por ti, vine a recuperarte ¿no estas feliz por eso? -dijo riendo ironicamente.

-¿Que quieres? - pregunto lo obvio.

La chica queria huir, no queria estar en la misma casa, en el mismo lugar que su padre.