El Chico de Mis Sueños

Capitulo 6

Por extraño que parezca, Harry se sintió realmente muy increíble. Incluso con el estúpido Señor Oscuro cerniéndose sobre él, solo tenía la sensación de que podía hacer cualquier cosa. Especialmente ahora que estaba cerca de su alma gemela.

Tony parecía un poco confundido y sorprendido, pero lo superó bastante rápido. En apenas unos segundos, su expresión se volvió suave y le sonrió. "Hola cachorro, déjame presentarte a mi equipo". Hizo un gesto a la gente detrás de él. "Clint, Bruce, Steve, Natasha y Thor".

Harry abrió mucho los ojos ante el nombre de Dios. "¿Eres Thor? ¿Tú puedes... ¿Lanzar rayos y cosas así?"

"Uno de mis muchos talentos", respondió Thor, haciendo que Harry se riera.

Él asintió. "Mis condolencias por la pérdida de Baldr, por cierto".

El Dios lo miró por un momento, antes de asentir y volverse hacia Tony. "Me gusta este. ¡Manténgalo a salvo!"

Harry se rió de los ojos de Tony y le hizo señas para que lo acompañara. Si alguien sabía lo que había que hacer por aquí, era McGonagall. "Déjame presentarte a una de las brujas más poderosas por aquí". Entró en el castillo y Tony lo siguió.

La directora adjunta y la actual directora interina explicaron a Remus y Arthur Weasley lo que podían arreglar en la Torre Ravenclaw y que estuvieran atentos a cualquier invasión. Cuando los dos hombres se fueron con un saludo hacia él, Harry se hizo a un lado.

"Profesor, permítame presentarle a mi alma gemela, Tony Stark, alias Iron Man. Su equipo está formado por... ¿Creo que los Vengadores es como te llaman?", Miró a su alma gemela que lo confirmó. Sonriendo, luego se volvió hacia los muggles. "Esta es la profesora McGonagall, la actual ama de casa en funciones y probablemente la bruja más poderosa que existe".

McGonagall se rió entre dientes y negó con la cabeza. "No es probable". Se volvió para mirar a los Vengadores. "¿Y están aquí para pelear con nosotros, magos?" Parecía que sospechaba mucho de ellos.

"Sí, señora", dijo el hombre que Tony había presentado como Clint. Harry sonrió y miró a McGonagall.

"¿Puedes decirles lo que hay que hacer? Tengo que preguntarle algo a Luna", explicó y luego los dejó.

Como era de esperar, sintió que Tony lo seguía después de un rato. Miró por encima del hombro y sonrió a su alma gemela, lo que parecía darle la confianza para caminar a su lado.

"Lamento no tener mucho tiempo para quedarme y hablar contigo".

Tony negó con la cabeza. "Estás increíblemente ocupado, lo entiendo". Dudó, antes de sonreír. "Y además, me gusta verte trabajar. De alguna manera es muy intrigante".

Harry se rió y asintió. Miró a Luna y le tocó el hombro. "Hola Lu, ¿sabes algo sobre la diadema de Ravenclaw?"

Luna asintió y se sentó sobre la mesa. "Se perdió hace unos años. El fantasma de Ravenclaw nos dijo cómo una vez pensó que podía confiar en nosotros de nuevo, pero estaba equivocada. Creo que quienquiera que lo haya encontrado, hizo algo terrible de él".

"¿Sabes dónde podría estar?"

Sacudiendo la cabeza, Luna se encogió de hombros. "Podría estar muy bien escondido ..."

Harry tarareó cuando se volvió hacia la puerta y vio entrar a algunos pelirrojos. Él les sonrió y corrió hacia ellos. "¡Ginny!"

¡La pelirroja abrió mucho los ojos y cayó alrededor de su cuello! "¡Te extrañé, Harry!", Dijo ella, besando su mejilla. "Vamos a hacerles saber que no pueden sacarnos sin pelear, ¿verdad?"