El Chico de Mis Sueños

Capitulo 9

"Señor, Maestro Harry, una bruja está actualmente en la sala de estar".

Tony levantó la vista del robot que estaba tratando de construir con Harry y se volvió hacia su alma gemela. Mientras Tony se divertía y trataba de enseñarle al amor de su vida un poco sobre robótica, Harry había intentado todo lo posible para que no funcionara. Fue un juego estúpidamente divertido, volviendo loco a Tony.

En este momento, Harry miró a la cámara. "Si es Ginny, solo dile que baje. Deberíamos felicitarla por finalmente descifrar el código y las salas mágicas cada vez que no la queremos aquí".

"No es la señorita Weasley", dijo JARVIS. No se dijo nada más, pero el silencio fue suficiente para intrigar a ambos y Tony se acercó con su alma gemela para ver quién demonios logró romper las estructuras de seguridad de Tony y Harry.

En la sala de estar había una mujer vestida con un traje afilado y una funda de varita visible en la cadera. Tony observó de cerca, mientras Harry dudaba por solo un segundo en su paso. Estaba claro que su alma gemela no estaba interesada en lo que esta mujer estaba a punto de decir. Había pasado demasiadas noches despierto solo pensando en lo que la sociedad mágica había hecho por él y, lo más importante... lo que le había hecho.

"Lord Potter", dijo la mujer. "He estado esperando conocerte por un tiempo".

Tony entrecerró los ojos. "¿Quién eres?"

Harry dejó que su varita se deslizara en su mano, listo para luchar, si lo hacía. Tony miró el traje oculto de Iron Man en su cuerpo para emergencias. Estaría listo si algo sucediera.

"No estoy aquí para pelear", continuó la mujer, ofreciendo una sonrisa apretada.

Resoplando un suspiro, Harry no soltó su varita. "No he tenido la mejor experiencia con personas que saben mi nombre y que 'esperaron un rato para conocerme', señora. Tal vez una introducción de tu parte sería un buen comienzo".

La bruja parecía molesta porque el alma gemela de Tony parecía estar en lo correcto. Ella entrecerró los ojos, antes de mirar a Tony. "Nuestro estatuto del secreto es la más alta ..."

"Tony sabe de magia".

"Y estoy muy decepcionado de que la batalla de Nueva York haya ocurrido sin la ayuda externa de ustedes", continuó Tony. "Podríamos haber ocultado el hecho de que había magia literal involucrada si nos hubieras dicho que lo hiciéramos. Por el amor de la mierda, teníamos al verdadero Dios del Trueno ayudándonos".

No agradó a la mujer en absoluto. "Si bien el estatuto del secreto en Gran Bretaña podría permitir que los miembros de la familia y los amigos cercanos de No-Maj sepan sobre ... sabes qué" Tony vio a Harry estremecerse ante ese nombre y envió una mirada a esa mujer ridícula.

"¿Cómo te atreves a entrar en mi casa sin invitación ni bienvenida, romper mis códigos de seguridad y salas especiales solo para decirle a mi alma gemela que no se le permite hablar de magia como si fuera un niño pequeño?" Tony la fijó en una mirada estricta. "Mi conocimiento de la magia puede no ser tan vasto como el tuyo o el de mi alma gemela, pero prohíbo que cualquiera hable solo con mi hombre que no ha ofrecido ningún saludo ni su nombre. ¡Sal de mi casa inmediatamente!"

"Soy la subsecretaria Susan Tra ..."

"¡Ya no me importa!" Tony estaba hirviendo. Él miró a la mujer. "Sal de mi casa y si la gente todavía quiere hablar con el gran Lord Harry Potter, tienen que invitarnos. No hay forma en el infierno de que lo deje a ustedes buitres después de lo que acaban de hacer aquí".

La chica Susan abrió la boca, pero Tony hizo un gesto hacia la puerta. "Vete". Trató de decir algo, pero su voz se había ido. Cuando Tony miró a su alma gemela, vio la mirada dura en sus ojos. La mirada que solo recibió cuando personas que no conocía intentaron hablar con él sobre la guerra mágica en Gran Bretaña y lo genial que era.