El Chico de Mis Sueños

Capítulo 1

"¡El Ministerio ha caído!"

Harry miró al Patronus, antes de que la boda fuera apresurada por los mortífagos. Todo sucedió tan rápido que Hermione lo agarró a él y a Ron, apareciendolos. No tenía idea de lo que estaba haciendo.

En el centro de Londres no era lo mejor que se podía estar, pero al menos había mucha gente alrededor. Salieron tropezando de las calles y entraron en un callejón lateral.

"¿A dónde vamos?" Ron preguntó, mirando a su alrededor en estado de shock. "¿Dónde estamos?"

"No importa" Hermione negó con la cabeza, con los pelos sueltos de su delicado peinado. "Londres muggle, lo primero que se me ocurrió".

Harry agarró a sus dos mejores amigos y los arrastró por el callejón, esperando que encontraran un lugar tranquilo para descansar un rato. "Tenemos que alejarnos de la gente. En caso de que nos encuentren".

"Y cambiarnos de ropa. Lo tengo todo conmigo". Hermione hizo un gesto hacia la bolsa y Harry asintió. Cambiarse primero, encontrar un lugar para hablar y descubrir qué sigue, y liego salvar al Mundo Mágico de Voldemort.

Fácil.

Esto no era nada nuevo. No para Tony. Había tenido este sueño por un tiempo. Sentado junto a la playa, viendo la puesta de sol. Después de Afganistán, la arena lo había asustado. ¡La puta arena! Al menos había tenido tiempo de enfrentar sus miedos en sus sueños y no con los buitres mirando desde lejos, documentando todo.

Estaba seguro de que había tomado un tiempo hasta que pudo sentarse en la playa nuevamente, viendo la puesta de sol. Fue un sueño tan simple. La mayoría de la gente pensaría que fue estúpido. Pero significaba libertad para Tony. Y paz. Al menos algo de paz que no podía sacar en el mundo real.

Su paz se interrumpió repentinamente, cuando encontró otra alma que aparecía a pocos metros de él. Llevaba una camisa gris suelta y jeans rotos sin zapatos. El hombre parecía más joven de lo que era y claramente conmocionado. Miró al cielo, respirando pesadamente.

Tony frunció el ceño, reconociendo esa mirada ... Se levantó y se acercó. Lentamente, esperando estar a la vista antes de que inevitablemente asustara al hombre.

No hay tanta suerte.

Como estaba bastante cerca, el hombre se sacudió y le lanzó el puño. Esquivando el ataque, Tony levantó la mano para atrapar su muñeca, la electricidad se disparó a través de ambos. El hombre se detuvo en sus ataques, mirando la mano sobre él, antes de retirar la mano.

"Déjame ir", dijo en voz baja con acento británico, todavía tratando de escapar.

Tony sonrió, pero lo soltó de todos modos. El hombre guapo retrocedió un poco, mirando a su alrededor. "¿Dónde estamos?"

"Uh" Tony miró la playa vacía. "En algún lugar de California, mi mejor suposición".

El hombre de agudos ojos verdes lo miró, frunciendo el ceño. "No tengo tiempo para esto. No puedo estar dormido, esto no puede estar sucediendo", terminó murmurando para sí mismo, dándose la vuelta para alejarse de Tony.

"Wow, oye, ojos verdes". Tony trotó detrás de él, caminando con él, incluso si estaba liderando el camino. "¿A dónde vas? ¿Sabes lo que esto significa, verdad?"

"Sí", dijo el otro hombre simplemente, mirando las olas, como si estuviera escaneando el lugar.

El corazón de Tony se detuvo por un segundo. Conocía muy bien ese aspecto. No podía ser que su alma gemela tuviera el mismo tipo de instintos que él. ¡¿Por qué el universo era tan malvado?! Y también parecía que este hombre era bastante joven. Tony ni siquiera estaba seguro de que sería legal en su país. Tal vez en realidad vino de Gran Bretaña, por lo que estaba soñando con él.