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« Por lo general, no suelo avergonzarme cuando hablo en público, ni tampoco tengo nervios traicioneros, pero cada vez que intento
acercarme a ti para hablarte, siento que vomitaré y mis piernas se vuelven como una gelatina, así que termino por correr hacia los brazos de mi amigo antes que hacer el ridículo frente a ti. Porque
me gustas y quiero que lo sepas antes de que te gradúes y ya no
                                                vuelva a verte más.

Sólo quería decirte lo mucho que te admiro, y sería genial obtener una       respuesta de tu parte, no importa si es un rechazo, lo único que quiero                              es  tener en mi memoria que me declaré a mi crush y recibí una   respuesta. Aunque debo admitir que en lo profundo de mi corazón estoy deseando ser correspondido.

Lamento si te he molestado con esto, y si es así, espero que me lo hagas saber, para no volver a hacerlo.

Ten un buen dia, hyung. »

Minho terminó de leer la pequeña carta que había encontradoen su casillero, frunciendo el ceño al no encontrar la firma delemisor

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Minho terminó de leer la pequeña carta que había encontrado
en su casillero, frunciendo el ceño al no encontrar la firma del
emisor. Pudo escuchar a sus mejores amigos parlotear acerca de
si era mejor una serpiente o un hamster de mascota, pero no
pudo dejar de ser importante para él al recordar las bonitas
palabras que había leído.

- ¿Por qué sonríes como idiota? También piensas que los
hamsters son mejores que las serpientes? -escuchó que
Seungmin preguntaba, acercándose para posarse a su costado.

-Claro que sí, hyung es intelectual -dijo Jisung, posando al
costado contrario.

Pero Minho no les prestó atención mientras guardaba la nota
entre las hojas de su libro, cerrando su casillero y girándose para tomar su camino al salón de clases. Con dos mocosos curiosos
siguiéndole el paso.

Mientras tanto, en una parte alejada del pasillo, Jeongin lloriqueaba con sus manos cubriéndole el rostro en tanto Chan le
reclamaba por haber olvidado dejar su firma en la pequeña carta.

Mientras tanto, en una parte alejada del pasillo, Jeongin lloriqueaba con sus manos cubriéndole el rostro en tanto Chan lereclamaba por haber olvidado dejar su firma en la pequeña carta

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Five Days [Jeongho]Where stories live. Discover now