VI

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—El abogado de mi padre me dijo algo extraño

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—El abogado de mi padre me dijo algo extraño.

Yeonjun se mantuvo en silencio y con la mirada fija en su plato de la cena intacto, sin embargo, le dio la chance a Yewon de continuar su charla, no podía ser descortés con su propia pareja, de todas formas.

—Es sobre la herencia perdida de mi padre.

— ¿Ah, sí? —la castaña asintió, entonces Yeonjun desvió la mirada con desgano, escuchando otra vez una loca teoría de qué tal vez su padre le cedió la mitad exacta de sus bienes a alguien que tal vez consideraba como su hijo, o peor, que era un hijo y para prevenir algún desastre como el trágico deceso del matrimonio no ocurriera.

Había muchas razones por las cuales él no estaba interesado en saber aquello, puesto que la necesidad creciente en la joven sobre hablar de ese tema en específico había nacido particularmente porque había escuchado el reportaje que se hizo de Soobin estableciendo su testamento con un heredero anónimo.

No podía importarle menos lo que el Señor Bang o Soobin hicieran con su dinero, no eran sus finanzas y conocer a quiénes hayan sido los afortunados que recibirán esas grandes cantidades de dinero o incluso hasta propiedades. No tiene la menor idea.

Pero, Yewon no parecía entenderlo, o querer entender su postura. Se lo dejó en claro hace semanas, dónde él mismo le detuvo la charla y le comentó que no le interesaba en lo absoluto quién pudo haber recibido ese dinero, y que si su padre lo hizo, él habrá sabido por qué.

Por supuesto, aquello pareciera que entró por un oído de Yewon y salió por el otro, porque fue el único tema de conversación que la chica ha sabido mantener. Al menos cuando cuando él estaba cerca.

Entonces, las campanas hicieron lo suyo en su cabeza.

—Yewon... ¿Qué insinúas?

La pareja fijó su mirada en la del otro, ambos guardando silencio cuando eso ocurrió, hasta que ella sonrió.

—Yo no estoy insinuando nada, Yeon.

《Cobarde.》 pensó una vez la chica mantuvo su sonrisa y siguió con la cena, ahí fue que terminó de entender todo el problema que estaba ocurriendo frente a sus narices, y de paso, sacándolo de quicio.

Se levantó de su asiento, mirando con decepción y molestia a Yewon, la cual ahora estaba confundida ante el repentino actuar del joven.

—Perdí el apetito, buen provecho.

Pronto se estaba alejando de ella, acercándose a la entrada y tomando un abrigo, cumpliendo por tercera vez su plan de escape en lo que llevaba de la semana. No tenía ganas de estar cerca de Yewon cuando ella estaba en un estado así de obsesionada por algo que no tenía mayor preocupación que un documento y dinero. Una cantidad grande, pero solo es dinero.

—Espera, Yeonjun —el joven ignoró los llamados de su pareja, saliendo de inmediato y sin darle la chance de seguir explicando su punto, pero no pudo importar menos cuando su pecho dolía con amargura y desesperación. No entendía la necesidad de Yewon para hablar de eso, o por qué de la nada le habría tomado el interés, un tema que ya no tenía la necesidad de volver a surgir, porque sacaba lo peor de ellos dos.

GCI II: Hostus || soojunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora