|• Capitulo 3 •|

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era un día tranquilo a decir verdad

Tanjirou había dormido lo suficiente para despertar tempano donde le entregaron su desayuno en la cama haciendo que se sonrojara mas los que se lo llevaron estaban encantados por ese pequeñín

Tanjirou al ya estar alimentado comenzó a hacer algunos ejercicios con ayuda de dos ancianitas amables que lo apoyaban y ayudaban como se les era posible

Paso una hora y con la ayuda de ambas ancianas logro poder caminar un poco más que antes haciendo que festejará con las ancianitas, brincando derrepente pero cayó al suelo por no tener su fuerza natural aún

mas fue levantado y llevado a un cómodo sillón lleno de almohadas suaves y bonitos, mientras ambas se fueron para dejarlo descansar un poco donde estaba apunto de quedarse dormido a no ser de que alguien le acaricio su cabeza

al abrir los ojos pudo observar a Douma con una gran charola llena de comida

_. Señor Douma, me alegro de verlos ._miro la charola que tenía el mayor frente a el no creyendo que fuera para el y fuera para otra persona
_. Gracias pequeñín, te traje una pequeña comida después de todo tu esfuerzo con las ancianas Mari y María ._
_. ¿Son..para mí?, muchas gracias señor Douma ._Tanjirou lo miro sorprendido viendo la linda comida en aquella charola, para agradecer y tomarla con delicadeza_. ¿Usted hace esto seguido con todos los de aquí? ._menciono Rando como se sentía al lado suyo mientras el comenzaba a comer un poco de fruta picada
_. Claro que si pequeñin, es algo que hago naturalmente ._menciono mirándolo con una voz convincente al igual que su sonrisa, pero eso era una gran mentira Douma en el día se encargaba de descansar y dejaba que sus creyentes hicieran todo ese tipo de deberes

Tanjirou comió de la charola feliz de hablar con alguien bueno y comía junto con Douma que hablaba con el, mientras el solo escuchaba y lo miraba mientras el contrario hablaba y debes en cuando hacía gestos graciosos haciendo reír al menoe

los creyentes nunca veían en el día a Douma mas ahora estaban sorprendidos y estaban creando suposiciones susurrando entre ellos, más aún hasi lo dejaron Hasi y dejaron a ese par en paz

...

estaba empezando la tarde y Tanjirou estaba en el patio sentado en la madera viendo como los arboles se movían con el viento fuerte que hacía ese dia, por alguna razón estaba hay en solitario extrañando a los creyentes mas de repente comenzó a oler algo extraño

tal vez había muerto un animal a lo lejos o algo parecido pero así como le llego ese extraño olor escucho a lo lejos una risa haciendo que voltee a donde provenía aquella risa

con pesar se levanto y comenzó a caminar con ayuda de unas muletas que le habían dado, a decir verdad el lugar era lindo pero tenia un olor que no era capaz de reconocer

camino un par de pasos cuando sintió que algo estaba pasando mas lo estaba ignorando, siguió caminando hasta que en lo alto de un árbol observo algo escalofriante

era un cadáver de una cazadora donde sus extremidades estaban desprendidas de su cuerpo haciendo que su sangre gotee de aquel árbol, Tanjirou estaba sorprendido hace meses que no había visto ese tipo de escenas, cubriendo su boca con su mano sorprendido

estuvo viendo aquel cadáver unos momentos mas hasta que su mente reaccionó y comenzó a acercarse mas a ella notando cada vez mas detalles escalofriantes

☯︎𝑆𝑒𝑟𝑒𝑚𝑜𝑠 𝑢𝑛 𝑎𝑚𝑜𝑟 𝑃𝑟𝑜ℎ𝑖𝑏𝑖𝑑𝑜...☯︎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora