Duxino One Shots

Tus cartas

Se encontraba mirando su guitarra, le daba miedo mirar hacia delante. Estaba dando un show en su instituto, se supone que debía tocar, su corazón se sentía pesado y ansioso. Buscaba mirar un punto fijo y encontró a el chico que siempre habla en la biblioteca, él salió de ahí solo para verlo, empezó a tocar la guitarra con más confianza y cantar.

Al parecer ese chico castaño, hizo desaparecer sus preocupaciones con una mirada, tal vez siente algo más por él.

Termina el show y la mayoría aplaude, esté solo seguía mirando a la misma persona, su mirada se iluminaba de solo verlo aplaudir emocionado, su corazón se podía acelerar con solo un pequeño movimiento.
Bajaba las escaleras, acaba de salir del show y de clases, debía ir a su casillero pero ahí encontró a un chico castaño algo alto, metiendo algo a su casillero.

Al verlo este se asustó, era bastante detallista con las cosas y podía ver el pequeño rubor del chico más joven, decidió no preguntarle nada, era tierno y entretenido verlo. Solo acarició su cabeza y decidieron irse juntos, en eso el chico más alto, lo espera afuera mientras esté recoge sus cosas. Es ahí cuando el de cabellos negros puede tomar la carta que este le hizo, solo podía pensar "Por qué no me lo dices tú?" Mientras veía el bonito diseño de aquella carta.

En esa carta, este le agradecía y se enorgullecía de su gran esfuerzo para salir a delante, era una carta bastante normal. El mayor nota como atrás de la carta hay algo escrito en cursiva "Te amo" se quedó observando eso, mientras adelante estaba el mismo chico que lo escribió, estaban en el departamento del mayor para estudiar y celebrar que le haya ido bien.

Estuvieron jugando juntos, mientras tomaban bebidas energizantes. Mayormente era el chico castaño su contrario prefería más el agua a cualquier cosa, se podría decir que "lo disfrutaba" más, algo que causaba gracia en el menor.

Él más joven estaba en la cocina, estaba preparando unos brownies en el microondas, quería hacer algo sencillo para su mayor. Esté se empezó a tensar al sentir unos brazos alrededor suyo, fue atrapado por el pelinegro. No era la primera vez que hacía eso pero lo llegaba a poner muy nervioso al punto de acelerar su corazón.

El pelinegro empieza hablar con él, Me gustó tu carta", al menor se le fue el aire apenas escucha eso "que carta?" Pregunta haciéndose el desentendido, "En la que confiesas que te gusto" respondé el chico, este sin darse cuenta que cayó en su trampa dice "solo te dije te amo" cambiando de posición para tenerlo de frente.

"Yo tambien te amo" le responde rápidamente el pelinegro, hubo un silencio entre ambos y vuelve hablar "Llevemos la conversación de tus cartas a otra parte no?" Mientras se acercaba más sin discreción, ambos se sintieron en la misma sintonía.

"Todo por tus cartas.."