Capítulo 25: Sangre.

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Jimin.

"Tu padre...es mi compañero"

Me trasformo. No puedo creer lo que acabo de escuchar.

—¿Qué es lo que dices? ¿Tu... compañero?

—Lo que escuchas Jimin... somos pareja... —llora.

Mi cuerpo desnudo se estremece por el frío.

Uno de los lobos a mi derecha se acerca hasta mí con unos vaqueros negros, una camisa roja de franela y unas botas de cuero. Me visto bajo la mirada atónita de todos a mi alrededor. Mi abdomen cubierto de moretones, mi rostro con dos enormes cortadas que atraviesan mis cejas y bajan hasta parte de las mejillas. Veo la preocupación en los ojos de todos, temen perder a su Alfa. Paso mis dedos por las cortadas y golpes, viendo cómo van desapareciendo una a una. Los Alfas somos capaces de acelerar el proceso de sanación si es necesario.

Observo con curiosidad a Moyeon y a mi padre frente a nosotros. Sus brazos delgados lo sujetan por el cuello, su rostro oculto entre el denso pelaje negro. Veo como mi padre lame el rostro de Moyeon que sonríe levemente por el contacto. Me intento acercar a ella, ponerle una mano en los hombros y tranquilizarla, pero mi padre me gruñe con fuerza. ¿Cómo es posible que ambos sean compañeros? ¿Eso significa que mi padre no es la otra mitad de la mujer que me dio la vida?

—Necesitamos hablar —digo con poca paciencia.

Moyeon levanta su cabeza, me mira a los ojos. Mi padre por el contrario me gruñe con fiereza. Intenta ponerse de pie pero ella lo detiene de golpe. Su cuerpo cae en la nieve, gimiendo por el dolor en sus huesos rotos. Me sorprendo al ver un par de lágrimas que resbalan por sus mejillas oscuras. Es la primera vez que la veo de esa manera, tan indefensa, tan vulnerable. De todos los lobos y lobas en la manada es Moyeon, sin lugar a dudas, una de las más fuertes y duras.

—Claro —responde—, pero antes por favor Jimin... deja que tu padre se cure un poco. Necesita descansar, está muy mal herido. Moriría si algo le llegara a pasar, así que por favor... te lo ruego.

Asiento.

—Llévenlo adentro —le digo a Jihyun y a Yoongi, mi delta.

—¿Estás seguro de esto?

—Quiero ver que es lo que ella tiene que decir.

Veo como entre los dos intentan levantarlo del suelo.

Mi padre se rehúsa en un principio. Patalea con fuerza intentando zafarse del agarre de Jihyun y Yoongi. Puedo sentir como sus ojos negros me miran con rabia. Sé que esto no se ha acabado, no puede terminar de la manera en la que lo hizo. Dios sabe que lo último que quiero hacer es terminar con su vida, aun cuando es un maldito hijo de puta insensible, es al final de cuentas mi padre y como tal lo tengo que respetar. Pero estoy furioso, mi lobo aullando en mi interior. Ambos queremos sangre, necesitamos demostrar nuestra superioridad a todos. Nadie, ni siquiera él, puede enfrentar al Alfa sin repercusiones.

Respiro profundamente.

Necesito tranquilizarme un poco. Aún puedo sentir como la adrenalina corre por mis venas, como mi corazón late con fuerza. De pronto escucho el murmullo a mí alrededor. Seulgi, apoyada en el marco de madera de la entrada principal, me observa con curiosidad y el cejo fruncido. Mi pequeño cachorro está con ella, sacudiendo su cuerpo. Debe haber sido un tanto difícil para él ver a su padre y abuelo pelear. Cierro mis ojos, intento pensar en Jungkook. ¡Joder! Cuanto lo necesito conmigo, a mi lado. Hace un par de horas que llegué a la manada y las cosas ya se fueron mucho a la mierda. Pero todo sea por él y nuestra felicidad.

Lobo Enamorado |(Adap.ジグク)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora