Estaba confundida. El dolor de cabeza era insoportable y me estaba costando abrir los ojos, no tenía ni idea de lo que que estaba pasando. Segundos después, un aluvión de imágenes algo borrosas llegan a mi cerebro entumecido, y de lo único que consigo acordarme es haber estado con…¡los niños!
Me incorporo de un salto olvidándome del dolor, las lágrimas inundan mis ojos al pensar en los chicos. Habían insistido en pasar el día conmigo, y yo estaba feliz de saber que estaban desenado pasar tiempo conmigo. Pasamos el día en el parque de atracciones, con los guardaespaldas a pocos metros siguiéndonos, algo a lo que me había costado acostumbrarme. Pero, en un segundo Dante había desaparecido y tanto los guardias como yo, nos despistamos y lo peor vino después. Intento mantener la calma mientras observo el lujoso despacho en el que me hallo, este no parece la típica habitación que aparece en las películas de terror. Hay demasiado lujo italiano.
Cualquier persona normal empezaría a aporrear la puerta y a gritar hasta quedarse sin voz. Pero, Santino me había preparado para este tipo de situaciones. "No muestres debilidad, tienes que mantener la compostura". Al recordar su voz repitiendo esas mismas palabras, me entran ganas de...estrangularle, y es lo primero que haré en cuanto aparezca. Maldito italiano mafioso y su estúpida sugerencia de mantener la calma. ¿Cómo podía hacerle caso sabiendo sus hijos, estaban en manos de unos asesinos hambrientos de poder?.
Me acerco con pasos lentos hasta la gran puerta de madera, acerco la oreja rezando de no escuchar ningún llanto. Al no oír ningún tipo de ruido, mi preocupación aumenta y puedo jurar que el corazón se me va a salir del pecho en cualquier momento. Justo cuando pienso que me voy a caer de bruces contra el suelo por culpa de la ansiedad, la dulce voz de Luca traspasa la puerta y a pesar de la situación, mis nervios van disminuyendo.
—Mi padre os dará una patada en el culo cuando llegue—cierro los ojos y suelto un suspiro lleno de alivio. Tampoco puedo esconder la sonrisa, ese niñato malcriado, tendré que enseñarle a dejar de parecerse a su estúpido padre.
Me alejo de la puerta, el pomo se mueve y mi respiración vuelve a la normalidad al ver a los chicos a pocos pasos de distancia. Un hombre grande los empuja dentro de la habitación, haciendo que Dante se tropiece, pero consigo atrapar su cuerpo antes de pueda tocar el suelo..
—Son un grano en el culo, será mejor que los mantengas callados si no me quieres ver cabreado—el barbudo con cara de perro rabioso cierra la puerta sin dejar que pueda al menos decirle un par de cosas.
A pesar de la situación me siento más tranquila al sentir los brazos de los chicos envueltos a mi alrededor. Es increíble que pueda quererlos tanto teniendo en cuenta el poco tiempo que llevan en mi vida, pero el corazón manda y el mío está dividido en demasiadas partes.
—Tenemos que ser fuertes Carina, papá no va a tardar y en cuando llegue, se va a cargar a cualquiera que nos haya puesto la mano encima—Giulio es el mayor, y lo único que quiere es parecer fuerte delante de sus hermanos, pero cree en sus palabras y yo también.
— Y no te olvides del abuelo—añade Dante con diversión. No me puedo creer que nos estemos riendo, aun sabiendo que los cuatro estamos encerrados, sin saber hasta cuando y si verdaderamente van a conseguir llegar a tiempo para rescatarnos.
Me siento con la espalda pegada a la pared, arrastrando el pequeño cuerpo de Luca conmigo. Dante y Giulio no tardan en unirse. Los abrazo con fuerza mientras rezo para que Santino y su padre no tarden en llegar para acabar con toda esa situación. Tampoco dejo de pensar en la paliza verbal que se llevará cierto hombre testarudo al que su ego no le deja...Tranquila Carina, primero hay que conseguir salir de aquí.
Es increíble lo mucho que ha cambiado mi vida en los últimos diez meses. Jamás podré olvidar aquel día en el que Santino D´amico llegó a mi vida para ponerla patas arriba.
...
Próximamente
20 de octubre 2023
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Estar sin ti no es una opción
RomansaViudo, padre de tres niños y Capo de la mafia italiana. Pocos saben quien es Santino D'amico, nadie sabe que lleva muchos años apartado de aquel mundo criminal. Vive por y para sus hijos, son la alegría de su vida y junto a su padre Massimiliano, se...