Prólogo: El mundo entre mundos

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NOTA: Puede que al principio no lo parezca, pero esta historia ocurre en el mismo universo de "Reencarnado en una Niña Elfo" de SakraTG (aunque no es canon, Sakra no le ha dado el visto bueno). 

Y como ya dije, al principio parecerá que estoy rompiendo el canon en muchas cosas básicas, pero les aseguro que no es así. Será más evidente qué está pasando más adelante, por ahora tengan paciencia si de verdad les importan esas cosas. Ya llegaremos a eso xd

***

Vacío.

Estoy flotando en medio de la nada. No hay diferencia entre arriba y abajo, izquierda y derecha, adelante y atrás.

El tiempo parece haberse detenido: cada instante es igual que el anterior, no hay diferencia entre pasado, presente y futuro. No sé si han pasado segundos, horas o siglos.

No hay aire, no hay luz. Tampoco hace frío ni calor. Es la nada absoluta.

Y yo... yo no respiro. Ya no.

Estoy muerto.

Mi nombre era Lucio. Lucio Alcántara. Pero eso ya no importa.

Permanezco flotando en este limbo, como un ahogado flotando en el agua, por quién sabe cuánto tiempo. Se siente como una eternidad.

Solo repito una palabra una y otra vez en mi mente:

"Marina... Marina... Marina..."

Eventualmente, a lo lejos comienzan a aparecer unas diminutas luces. Parecen estrellas, solo que son de colores que nunca había visto, que nunca había imaginado, colores que no sabía que eran posibles.

Las luces se hacen más grandes, creo que se están acercando... o más bien, yo me estoy acercando a ellas. Puedo sentir una fuerza jalándome gentilmente hacia donde están, y yo, como una polilla hacia una lámpara, no puedo resistirme.

Las luces se hacen gigantescas: resulta que no eran puntos, sino orbes descomunales, tal vez más grandes que un planeta, y hay tantas, se extienden en todas direcciones hasta donde alcanza la vista. Me quedo embelesado y olvido todo lo demás mientras la fuerza invisible me guía hacia una de ellas... pero de repente se detiene bruscamente.

Me quedo atorado en este espacio entre los orbes, como hipnotizado, sin poder moverme.

En eso todo a mi alrededor se sacude, incluso el espacio mismo. Los orbes se apagan por un momento y yo temo, en lo más profundo de mi alma, regresar al limbo en medio de la nada. Todo menos eso.

Entro en pánico e intento moverme pateando y braceando, como intentando nadar en agua. Descubro que usando el pensamiento puedo desplazarme. Es bueno saber eso. Es como volar.

Otra vez, todo vuelve a agitarse y algunos orbes se apagan por unos instantes. ¿Será el fin del mundo?

Escucho algo. Un grito. Una voz, profunda y a la vez ligera, grave pero al terminar deja una sensación aguda, como la comida que sabe de un modo mientras la masticas, pero revela otro sabor después de tragar. Creo... creo que trata de decirme algo.

YO: ¡¿Hola?! ¡¿Hay alguien ahí?!

Espero un momento para obtener una respuesta, y para mi sorpresa, sí la obtengo.

ATHOZTHA: ||~„«‰*§

No sé por qué, pero escuchar eso me perturba en lo más profundo. Instintivamente sé que si escuchara mucho tiempo esa voz, algo dentro de mi se rompería irremediablemente, y yo implosionaría en mi propia esencia.

El espacio se vuelve a agitar a mi alrededor. Ahora la luz de todos los orbes está parpadeando, como si fueran a extinguirse en cualquier momento.

YO: ¡¡¿Qué demonios está pasando?!!

Reencarnados en un mundo de magia (Sakraverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora