A Tu Servicio [Villain! Deku X Lectora]

✦⋆⋇ Capitulo 25 ⋇⋆✦

N/A: Antes de empezar el episodio, me gustaria recomendar escuchar la canción de la multimedia después de leer el capítulo, obviamente es decisión de cada uno si lo hacen o no, pero como dije, es solo una recomendación. Disfruten♡
(–Laufey; Let You Break My Heart Again–)
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~"Dulce"~
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Dios... ¿Qué tonteria hice?
¡No tengo nada preparado y ya va a llegar!

Soy un idiota, idiota, idiota, idiota.

No fue mi culpa haber dicho que la esperaba con algo en casa cuando ella llegase, fue culpa de Izuku, no de Deku.

Maldición.

Miré a mi alrededor, habían muchas cosas, comida, estaba levemente decorado, más limpio de lo normal y música suave que no se notaba mucho, incluso si estabas cerca de los parlantes la escuchabas bajo.

Pero para mí, esto no es nada. No, no lo es, ella se merece más y más en cada momento, por cada minuto que pasa y por cada segundo que avanza. Se merece todo lo lindo del mundo y yo ni siquiera puedo darle una simple flor que arranqué del jardín que hay en el primer piso de los departamentos.

No puedo, de verdad que no.
Mierda, me gusta tanto que ni siquiera puedo pensar bien cuando estamos cerca.

La puerta sonó, era ella.
Me escondí tras el mesón de la cocina, agachandome ahí por unos segundos mientras la oía mover las llaves, abrir la puerta y luego cerrarla.

— ¡Ya estoy en casa! — las llaves sonaron golpeando el mueble que hay en la entrada.

Me levanté tirandome aire a mi mismo con mis manos intentando bajar el calor que tenía en todo mi rostro.

¡Mi corazón esta palpitando rápido y mi estómago da vueltas otra vez!

Me dispuse a caminar hacia la entrada mientras la oía quitarse sus zapatos con cuidado.

— B-Buenas noches, ______... — murmure bajo el marco de la sala, sin poder asomarme por completo de lo nervioso que estaba.

Ella sonrió mirándome y poniéndose de pie.

— Buenas noches, Izuku —

Tú voz suena tan linda cuando dices mi nombre... Por favor dilo otra vez.

— ¿Qué tal te fue en tu trabajo hoy? — me preguntó de cerca, no pude responder bien.

— ¿T-Trabajo...? ¡Oh, bi-bien! — respondí nervioso, que tonto, ni siquiera fui para allá hoy — ¡Quiero decir-! Ah, l-lo siento me confundí. No fuí hoy, no me necesitaban esta vez. —

Asintió pasando por el pasillo, caminando hacia su habitación.

— Me voy a cambiar y enseguida vuelvo, ¿Okay? —

Yo asentí en respuesta sin poder decir nada, solo observando como caminaba mientras su cabello se movía con suavidad en sincronía a la falda de su uniforme, ¿Cómo puede hacer eso? Parece magia.

Me quedé paralizado aún bajo el marco de la sala abrazándolo con mi torso y brazos, viéndola entrar a su cuarto y cerrar la puerta al mismo tiempo, escuchando como lanzaba su mochila a la cama y abría los cajones en donde, suponía yo, guardaba su ropa.

Me puse recto otra vez, caminando hacia donde estaban las cosas que había preparado hace un par de horas mientras me aseguraba de que todo estuviera en orden.