Capítulo 60 - Que comience la fiesta

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*Narra Constanza*

Recargo mi cabeza en la ventana mientras observo cómo cambia el paisaje ante mí mientras más nos acercamos a Madrid.

Con todo lo que estaba pasando en mi vida se me olvidaba que seguía teniendo 21 años, es por eso que cuando Sira me dijo que iba a celebrar su cumpleaños en una discoteca en la capital, no dudé en aceptarlo.

Su cumpleaños en realidad era hasta en una semana, pero ella quería aprovechar que los chicos tendrán partido para poder festejar allá. Yo no iría al partido claro, pero Juan Pablo si, que mi ex novio jugará en el equipo no era impedimento para que él fuera a ver el partido con Ciro.

- ¿Sabes hace cuanto no voy a un partido del Barça? ¿A un clásico? el fútbol en Francia no es como el de aquí, Connie.- Recuerdo sus palabras y me da risa, si yo fuera él seguro que tendría otra actitud. Es por eso que lo quiero tanto, en su corazón no hay espacio para el rencor.

Juan Pablo llegó hace una semana y yo era la más feliz, su compañía me hacía bastante bien y cuando estaba con él dejaba de pensar en todo. Habíamos aprovechado para ver todo lo que pudiéramos sobre la boda, quería que él estuviera igual de involucrado que yo aunque estuviera lejos y por eso usamos esa semana para ver y adelantar todo lo que podíamos con ayuda de nuestras madres.

Prácticamente ellas hacían todo y nosotros nos limitamos a asentir con la cabeza, era lo mejor que podíamos hacer para evitar cualquier conflicto, como con el tema de las invitaciones. Mónica me había recomendado diseñadores grandiosos y excelentes y vaya sorpresa se llevo cuando se enteró de quien las hizo en realidad.

- Cariño, están preciosas las invitaciones. ¿Con cuál de los chicos que te recomendé las mandaste a hacer? - Recuerdo que me dijo cuando se las entregamos en la cena que tuvimos con nuestras familias.

- Con ninguno, le pedí a mi mejor amiga que me las hiciera. - Su cara era de desagrado total y yo obviamente me lleve un regaño por parte de mi madre en los baños del restaurante.

- ¡Tienes que estar a la altura Constanza! Se que Daniela y tú son mejores amigas desde que tienen 4 años, pero no puedes hacerle esas groserías a Mónica.

- No es para tanto mamá.

- O te comportas a la altura o mejor dejas que Mónica y yo nos encargamos de todo. Esto no es un juego Constanza, estamos hablando de tu futuro. - La vi salir del baño y yo solo rodé mis ojos.

No sabía cuál era el problema con que mi mejor amiga me hiciera las puñeteras invitaciones, era un simple pedazo de papel. Después de eso deje que ellas se encargaran de todo, no iba a estar teniendo disgustos por algo tan simple como aceptar lo que ellas querían.

- Cariño, hemos llegado. - Estaba tan enfrascada en mis pensamientos que ni siquiera me di cuenta de que el tren ya había parado.

Tomamos un taxi hasta nuestro hotel y al llegar nos encontramos con Ciro, yo me fui a la habitación y ellos al estadio. Abro la puerta del cuarto y entro arrastrando las maletas, cierro y me dejo caer sobre la cama agotada.

Le mando un mensaje a Sira avisándole que ya estamos aquí, ella me contesta que está con todos en el estadio y no puedo evitar sentirme frustrada. Yo también debería de estar en el estadio divirtiendome y festejando con mi prometido y mis amigos y no podía porque no quería tener ningún tipo de contacto con Gavi, suficiente iba a ser con verlo en la fiesta de Sira, no podía ir a ver un partido y no pensar en como eran las cosas antes de todo. Estúpido Gavi, ¿por qué tenía que arruinarlo todo?

Se que no debería de importarme que él esté ahí, pero no puedo evitarlo, por más que intente sacarmelo de la cabeza y hacerme recordar constantemente de que es un idiota y que lo odio, el recuerdo de todo lo que vivimos es más grande.

Mi gran casualidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora