3.

9 2 0
                                    


El dolor del desamor suele sentirse muy dentro de uno, en las entrañas, como si se te acabara el aire. Crees que vas a morir y que eso es lo peor que te podría pasar, pero lo peor es que sigues vivo.

Lo peor es que el dolor y la falta de oxígeno permanecen ahí, silenciosos entre cada risa que emites, lo que parece interno se vuelve físico.

Sigues vivo después de soltar pero, cómo duele el cuerpo. Abrir los ojos para reír tras la tristeza entonces cuesta más que nunca.

-Yo también cargué tu dolor,
También me sentí muy triste.

Y está bien.

Otra Historia más de AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora