Otra oportunidad para crecer

Resignación

Editado por: Laynox.

El viento sopla levemente. Puedo sentir el calor de la mañana, al igual que la humedad y el peso de una mente lista para afrontar mil batallas.

Porque hoy es el día. Es el día que me enfrentaré al desafío más ridículo de toda mi nueva vida. Uno que llegó más rápido de lo que deseaba.

Pero antes de seguir con mi profético destino, cabe aclarar que ahora soy un niño supremamente competente a los ojos de mi familia.

Dejando aún lado mis propias exageraciones. La verdad es que sí. Después de que mamá decidió reconectarse con sus conocidos, el resultado no ha sido para nada reprochable. Todos recibieron a Latte con los brazos abiertos. Mis abuelos, sus primos y amigos que tenía en la capital de 'Canberra'.

La experiencia fue un poco exasperante. Ya que todos querían conocer al simpático y tímido niño que era. Pero como era de esperarse de mi parte, fui paciente y tranquilo, aunque no puse mucho esfuerzo en conectarme con toda mi nueva familia. Actúe de la manera más normal posible. Algo que llevó a elogiar a mamá por el jovencito tan educado que era.

Por supuesto, no podía engañarlos para siempre. Era evidente después de nuestras interacciones que fuera imposible no comparar mi conducta con la de los otros infantes de la familia. Hasta ahora me comportaba como un niño atípico, lo que generaba algo de incertidumbre al respecto. Pero fue algo a lo que todos se acostumbraron eventualmente. Incluso un primo preguntó si de verdad Latte era mi madre, ¡Ja! ¿Él por qué preguntaría eso? Bueno, resulta que mamá puede ser un poco Karen a veces. Por lo tanto, era de esperarse que su actitud me influenciara.

Aunque sea un poco.

Después de todo, cómo no aprovechar el crear un pequeño alboroto de vez en cuando y que tu madre te respalde.

Cabe aclarar que Latte sigue siendo una persona bastante amable con todas las personas en general. Las veces en las que su mal genio toma el control tiende a ser en ocasiones en específico cuando siente que la están tratando injustamente, incluso si fue un accidente.

Claro, una persona normal, también se enojaría. Pero es el que tanto controlas esas emociones o el cómo reacciones lo que hace la diferencia.

Pero me estoy desviando. Sin embargo, para resumir el resto; de mi lado ahora tengo una vida más normal, supongo. Ahora conozco a nuestros vecinos. Me llevan a hacer las compras, al parque, además de que hemos viajado para ocasiones familiares con mayor frecuencia.

La tía Mocca tuvo una niña, a quien nombró como Hebe. Por lo tanto, están bastante ocupados en estos días.

Por otro lado, rara vez veo a Calypso. Desde la vez que nos conocimos, solo nos hemos visto otras dos veces. Uno de esos momentos fue de hecho poco después, en la fiesta que se conmemora el esperado nacimiento del bebe y se revela el sexo del niño. O a lo que coloquialmente es conocido como "Baby shower." Y la segunda vez fue cuando toda la familia se reunió tiempo después, cuando nació Hebe.

Como cabría esperar, ella llamaba mi atención para saludarme o despedirse, y después continuaba socializando con el resto de la familia. Me preocupaba enormemente que ella sea recurrente en mi vida y fuera capaz de desentrañar mi secreto o alertar a todos exageradamente de que algo estaba mal conmigo y complicar mi existencia. Pero fuera de mis expectativas y salvaje imaginación, Ella siempre estuvo al margen. Fue amable, fue servicial, pero sobre todo fue considerada.

Tiene todo el sentido del mundo. No estaba en su trabajo como maestra. Y mucho menos estar al pendiente de los hijos de otra persona. Siento que me volví algo paranoico con sus interacciones, pero todo apunta a que de momento sigo aparentando ser un niño. Más o menos. Y eso es algo que me ha tranquilizado más de lo que esperaba.