Un Amor entre cenizas

Capitulo 25. Boda

Un mes ha pasado desde que mis abuelos vinieron a Londres, un mes lleno de altos y bajos. Pero si tengo que realizar un balance, este debe de ser positivo.

No puedo negar que estoy nerviosa ante mi próxima boda, ha pasado el tiempo acordado desde que se hiciese oficial el compromiso y apenas quedan unos días.

Pudimos dejarlo para más adelante ya que ese hombre ya no estaba en nuestra vida, pero entendí que Paul no quería esperar más, el estaba listo para dar el siguiente paso.

Y ya no tengo edad para esperar, un año más y hubiese sido una solterona en toda regla. Eso no me molestaba, hace tiempo que asumí que el amor no aparecería en mi vida pero lo hizo y todavía no tengo muy claro si lo que siento por Paul es amor pero se siente bien estar con el así que porque no hacerlo.

Me apena que recién encuentro a mis abuelos, y ya me tengo que separar de ellos. El abuelo me ha dicho que eso no pasará, mi casa está al lado de la de Paul y si no hubiese sido así el abuelo habría comprado una casa justo enfrente.

A menudo me pregunto como le estará yendo a Millie en su nueva vida, ese hombre será bueno con ella? o la tratara igual de mal que su madre y su hermana.

--- Elizabeth deja ese libro y vamos a la modista ---

--- Dame un momento Corina ---

Dejo el libro y subo hasta mi dormitorio, cojo un chal, doy una mirada a mi alrededor sintiendo una opresión en el pecho. Dentro de poco está dejará de ser mi casa.

Cierro la puerta y bajo las escaleras, al final de estas me están esperando la abuela y Corina.

No tardamos en llegar a la tienda, de un momento a otro me veo envuelta en un sin fin de telas.

--- No creen que esto es demasiado?---

--- No y no continúes con eso ---

Mi abuela me regaña sin ni siquiera mirame, escucho a Corina reír por detrás. No creo que sea necesario tanto para casarse.

Además del vestido han elegido todo mi ajuar personal, camisones, camisolas...

Después se tres horas, miento! Sí digo una mentira estoy tan cansada que necesito salir de allí. Menos mal que me han dejado marcharme a la casa.

--- Sabes que no me gusta que andes sola por las calles de Londres ---

Volteo la cabeza y veo a Paul detrás de mi. Es que no puedo andar un momento sola, o es que me tiene vigilada?

--- Siento dolor de cabeza, necesitaba tomar aire y volver a casa ---

--- Si estás enferma lo mejor es que te lleve al doctor, además hablaré con mi madre y con tu abuela, qué es eso de dejarte sola y enferma... ---

--- No...---

--- No, no digas nada ya todo está dicho ---

--- Paul qué no! que no me pasa nada, solo estaba cansada y mentí para poder salir de allí ---

El me mira asombrado, ante esa mirada solo puedo agachar la cabeza con vergüenza. El me coge de la barbilla y me mira a los ojos. Siento que mís piernas tiemblan... está demasiado cerca, puedo notar el calor en mi rostro.

Noto como se acerca todavía mas, cierro los ojos esperando el beso, un beso que nunca llega.

Abro los ojos avergonzada y enfadada, doy un empujón a Paul y salgo corriendo hasta la casa.

Los siguientes días me niego a verlo, no sé las excusas que invento, muchas quizás demasiadas pero siento herido mi orgullo, además me siento estúpida, debí de poner hasta morritos, de verdad me siento horrible y patética. Ni mi prometido ha querido besarme.

De nuevo me atacan las dudas y las inseguridades, no puedo perdonarle que me haya vuelto a hacer sentir insegura. Al menos aún no.

He pensado que quizás no me beso porque había gente, pero que más daba eso, sí estábamos prometidos y solo era un beso. Me da igual sigo molesta y enojada. Unas mil cosas pasan por mi mente. Necesito descansar y tratar de dormir un rato, sino siento que voy a explotar.

....

Me han vestido en mi casa, la abuela dice que aunque Paul no viva en la casa de Corina y Charlie nos es lo correcto, es mejor que salga de la casa materna para que nadie pueda hablar nada negativo sobre mí.

No he querido discutir, pero eso es un sinsentido, llevo viviendo con ellos bastante tiempo ya para que me importe lo que tenga que decir la gente. Bueno la verdad es que la columna del periódico si es bastante  molesta.

Corina me ha vestido junto a la abuela, hoy he decidido ponerme las joyas que conservo de mi madre y sin querer he conseguido que la abuela llore al recordar su procedencia. Veo como la abuela y Corina se miran nerviosas.

--- Yo hablaré con ella... ---

Mi abuela sonríe y sale del dormitorio dejándome con Corina.

--- De qué tenemos que hablar?---

--- De lo que va a pasar esta noche con tu esposo ---

--- Ya se lo que pasa, lo vi en el burdel...---

--- Qué crees que viste?---

--- De verdad tengo que hablarte de esto?---

--- Si por favor, necesito saber lo que sabes y si Esmeralda te ha explicado algo sobre lo que sucede entre un hombre y una mujer ---

--- Puff! Una noche por casualidad abrí una de las puertas de las chicas y vi a un señor desnudo o casi sobre una de las chicas frotándose. Esmeralda me dijo que era mejor olvidarlo y que los caballeros pagan por ese tipo de cosas ---

--- Está bien, sabes algo y a la vez nada. Siéntate un momento voy a explicarte lo un poquito mejor...---

....

Todavía no me puedo creer que eso tenga que pasar entre Paul y yo! Preferia quedarme con mi propia versión era mucho menos traumática.
Agradezco que Corina me dejase sola para poder procesar todo lo que me ha explicado hace un momento.

Suenan dos golpes en la habitación, doy permiso para entrar. La puerta se abre y mi abuelo entra en la habitación.

--- Llevas un vestido precioso, eres la novia más bonita de todo Londres ---

--- Solo de Londres! ---

Mi abuelo se pone nervioso de inmediato, cojo sus manos y dejo un beso sobre ellas.

--- Se lo que querías decir, yo tengo el honor de ir del brazo del hombre más apuesto de todo el país, creo que la abuela se enfadara mucho conmigo---

--- La abuela no puede quererte más de lo que ya lo hace ---

--- Vamos a llegar tarde, estoy segura de que el viejo de tu abuelo es el culpable de tu tardanza ---

Mi abuelo y yo nos miramos sonriendo, la abuela suele tener unos arranques bastante fuertes, pero si sabes cómo llevarla es un ser muy dulce.

Viajamos los tres en el carruaje, miró por la ventana y veo el cielo cubierto, ojalá no llueva la abuela dice que es de mal augurio que se desarrolle una tormenta en medio de una boda.

Minutos después nos encontramos a las puertas de la pequeña capilla que he elegido para este día, nunca quise una gran boda, y menos necesito a una aglomeración de personas mirándome pero no es como si pudiese elegir.

No tener una gran boda era impensable, el título de mi esposo precedía una gran celebración. Así que al menos he conseguido que la ceremonia se realice en un lugar más íntimo.

Bajo con la ayuda de mi abuelo y del cochero, camino cogida del brazo de mi abuelo hasta el interior de la capilla, me paro y no se porque, mis piernas no responden mi respiración se acelera, siento que las fuerzas le abandonan.

Mi abuelo coge mi mano con fuerza y me dedica una sonrisa tranquilizadora, suspiro y cojo impulso. Solo unos pasos me separan de Paul.

El abuelo me entrega y le dice algo en el oído, algo que no soy capaz de escuchar, la ceremonia es bastante corta y poco tiempo después somos declarados marido y mujer.