capitulo 6 pelea de bestias

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En la habitación de Dooshik, dejó a Dan en la cama con un gesto apesadumbrado.

"Puedes tomar mi ropa y ducharte si lo deseas; te dejaré solo. Sal cuando sientas que estás listo. Perdón por actuar impulsivamente", murmuró Dooshik, con un deje de arrepentimiento en su voz.

Sin decir una palabra más, Dooshik se alejó y permitió que Dan tuviera su espacio en la habitación. Las lágrimas silenciosas de Dan seguían fluyendo, abrumado por la cascada de emociones que lo había envuelto.

Dooshik se recostó contra la puerta, sintiendo la necesidad de darle a Dan la privacidad que requería para procesar sus sentimientos sin sentirse humillado o avergonzado.

Mientras esperaba a que Dan se cambiara, Dooshik decidió hacer una llamada, aunque su corazón seguía herido por haber visto a Dan tan vulnerable.

"Viejo, surgieron varios problemas. ¿Tienes el dinero listo?", preguntó Dooshik con una voz tensa, a punto de sacar un cigarrillo, pero reconsideró y guardó la caja de cigarrillos en su bolsillo.

"Espera, campeón, un trato es un trato. Tienes todo el dinero en tu cuenta... Vaya, parece que te has metido en un gran problema", respondió la voz al otro lado de la línea. Dooshik mantuvo la calma.

"No es asunto tuyo. Ya cumplí con mi parte. Si necesitas un favor en el futuro, estaré aquí para ayudarte", afirmó Dooshik mientras se dirigía a la cocina, decidido a preparar algo que animara a Dan.

"Siempre sabes que puedes contar conmigo. Eres un buen muchacho. Ahora entiendo por qué te retiraste de este sórdido mundo", dijo el señor al otro lado de la línea, y Dooshik solo pudo responder con un agradecimiento antes de colgar.

Dooshik cocinó un poco de gachas de avena reconfortantes para Dan y dejó un surtido de dulces frente a la televisión, junto con una nota escrita con cuidado:

"Te he dejado comida en la cocina. Puedes comer lo que desees y ver la película que prefieras. Llegaré tarde, pero recuerda que no es tu culpa."

Con un suspiro de alivio, Dooshik notó que los sollozos de Dan habían cesado mientras se acercaba a la puerta.

"Saldré y estaré un tiempo fuera, así que siéntete libre en mi casa...", comenzó a decir, y una sombra cerca de la puerta confirmó que Dan lo estaba escuchando atentamente.

"Recuerda que nada de esto es tu culpa. Eres una persona admirable, Dan. No lo olvides", concluyó antes de alejarse lentamente. Mientras salía de su apartamento, Dooshik encendió un cigarrillo para calmar sus propios nervios.

Dooshik tenía una idea peligrosa para liberar a Dan de esa prisión emocional que lo tenía atrapado. Regresó a la casa de Jaekyung, notando el desastre que seguramente había dejado tras su rabieta.

Dooshik no titubeó al enfrentar a Jaekyung, quien aún estaba destrozando cosas en la habitación.

"¡Jaekyung!", gritó Dooshik, logrando que Jaekyung lo mirara con ferocidad en los ojos.

"Tu maldito, ¡tráelo de vuelta!", gruñó Jaekyung, su furia palpable en cada palabra.

"Ya has lastimado suficiente a Dan. Si quieres pelea, aquí estoy yo", dijo Dooshik con determinación, desafiando a Jaekyung.

"Un sparring, tú y yo, sin reglas. Solo gana el que mate al otro", retó Jaekyung antes de lanzarse hacia Dooshik.

Dooshik y Jaekyung se encontraron en el centro de la habitación, la tensión en el aire era palpable. Cada uno de ellos estaba dispuesto a luchar con todas sus fuerzas, pero había algo más que impulsaba su enfrentamiento: la protección de Dan.

El primer movimiento lo hizo Jaekyung, con un rápido puñetazo directo al rostro de Dooshik. Sin embargo, Dooshik, con reflejos dignos de un verdadero luchador, esquivó el golpe con un movimiento de cabeza. La frustración se reflejó en los ojos de Jaekyung cuando su puño atravesó el aire vacío.

Dooshik respondió con un contragolpe veloz, lanzando un gancho que casi alcanzó la mandíbula de Jaekyung. Este último apenas tuvo tiempo de bloquear el golpe con sus antebrazos, pero sintió el impacto resonando en sus huesos.

La pelea se desarrolló con una intensidad impresionante. Ambos hombres se movían con una gracia casi animal, intercambiando golpes y patadas en una danza de fuerza y agilidad. La habitación se llenó de sonidos de golpes, gruñidos y el ocasional crujido de algún objeto roto.

Jaekyung intentó desesperadamente un derribo, pero Dooshik estaba preparado. Con un movimiento hábil, evitó el agarre de Jaekyung y lo empujó hacia atrás. Jaekyung cayó al suelo con un golpe sordo, pero se levantó rápidamente, más enojado que nunca.

La pelea se volvió aún más feroz. Ambos hombres estaban decididos a ganar, pero Dooshik tenía un objetivo más allá de la victoria en el combate: proteger a Dan. Cada golpe que lanzaba estaba imbuido de esa determinación.

Jaekyung, por su parte, estaba cegado por la ira. A pesar de sus habilidades como luchador, su enojo le hacía cometer errores, y Dooshik los aprovechaba con precisión. Era como si pudiera anticipar los movimientos de Jaekyung antes de que ocurrieran.

La pelea continuó durante lo que pareció una eternidad, hasta que ambos hombres, exhaustos y magullados, se detuvieron un momento. Se miraron fijamente, el sudor goteando por sus rostros, la respiración agitada.

Aunque Dooshik estaba herido y  cansado, su determinación seguía firme. Sabía que tenía que sacar a Dan de esa situación peligrosa, y estaba dispuesto a hacer lo que fuera necesario. La pelea con Jaekyung era solo el comienzo de su plan para liberar a Dan de esa prisión emocional que lo tenía atrapado.

La pelea quedó en un empate, con ambos hombres debilitados y exhaustos, pero ninguno dispuesto a ceder.

"Nada mal para la bestia del ring", comentó Dooshik mientras se limpiaba la sangre de un labio roto con la manga de su camisa.

"Maldito", gruñó Jaekyung, su voz llena de frustración y rabia contenida.

Entonces, Dooshik propuso una solución drástica y definitiva.

"Este es el trato: lucharemos en el ring por Dan. Si yo gano, me entregarás a Dan y nunca volverás a abusar de él", declaró Dooshik con determinación en su mirada.

Jaekyung lo miró con ojos entrecerrados, evaluando la propuesta. Sabía que Dooshik era un luchador formidable y que la pelea en el ring sería un desafío real. Pero también entendía que esto era lo que estaba dispuesto a hacer para proteger a Dan.

Después de un largo silencio tenso, Jaekyung finalmente asintió con la cabeza, aceptando el trato. La decisión estaba tomada, y la pelea en el ring sería la última oportunidad para Jaekyung de mantener su control sobre Dan o enfrentar las consecuencias de sus acciones.

Wuuaaaaaaaa me costó un chingo este cap pues tuve que ver una pelea real para poder narrar la escena, aunque la idea principal era que dooshick le tirará el dinero en la cara a jaekyung para que dejara a dan pero lo tome como la segunda opción que dooshick tomaría en caso de perder la pelea OwO

"Renaciendo Junto A Ti"  Dooshik X DanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora