Seis: Amar nuestra dulce simpleza

5.6K 434 259
                                    

Una gota de agua mancilló el papel, escurriendo la tinta azul. Las manos de Harry temblaban.

—La noche antes de la boda, estaba un poco ebrio..., intenté llamarte pero tu número ya no existía. Llamé tu casa, le pedí a tu madre que me dejara hablar contigo..., me dijo que ya no vivías ahí y colgó. Ahora sé que no mintió, en ese entonces creí que le habías pedido que dijera eso si llamaba—Louis esbozó una nostálgica, efímera y pequeña sonrisa, apenas visible.

Harry levantó la borrosa vista hacia él, sintió más lágrimas en sus mejillas cuando parpadeó.

—¿...q-qué es...?—balbuceó, incrédulo, abrumado por la excesiva cantidad de emociones que bombardeaban un pensamiento tras otro—. ¿Q-Qué es esto? T-Tú estabas...e-estabas pensando en mí antes de casarte, p-planeabas...¿q-querías regresar conmigo?

—Lo consideré incluso unos minutos antes de pisar el altar. Mi motivación para quedarme no fue Madison, fue Lexi. Era joven, estaba asustado y sabía que no estaba preparado para eso, pero cuando escuché los latidos de su corazón en el primer ultrasonido, supe que mi lugar estaba a su lado, que pondría su felicidad por encima de la mía, que no existía una sola cosa que no sacrificaría por ella. Me casé con Madison para intentar darle una familia a mi hija..., y renuncié a la idea de buscarte.

Entonces sí había sido una omega quien logró que Louis sentara cabeza, pero la despiadada mente de Harry se plagó de inseguridades y le impidió pensar antes que esa persona no fue Madison, sino Lexi. Su Lexi. La niña que hacía brillar los ojos de Louis con solo respirar, la tímida bebé que alojó a Harry en su corazón desde el primer momento, que los había hecho reencontrarse para reparar lo que ella no rompió.

Louis había dejado de lado su juventud y se había forzado a crecer abruptamente, manteniendo a su hija como única prioridad. Saber eso fue una pésima jugada para los desorganizados sentimientos de Harry, porque ahora lo amaba aun más; saber que, para Louis, Lexi estaba por encima de todos, incluso de él, provocaba que su corazón latiera con un fervor mayor al que creyó posible, llamando su nombre, adorándolo.

—Por eso sabe mi nombre..., ¿Madison leyó esta carta? ¿T-Tuvo algo que ver en el divorcio? ¿Influí de alguna manera en que ella dejara a Lexi?—preguntó Harry, repentinamente angustiado, dejando el cuaderno sobre el escritorio.

—No, amor, por supuesto que no—Louis tomó su mentón con dos gentiles dedos—. El divorcio fue la primera y única decisión acertada que Madison y yo hemos tomado, y el que ella haya escogido no ser una figura materna para Lexi no tiene ninguna relación contigo. Encontró la carta cuando estábamos en trámites legales de la separación, no pidió detalles, solo me preguntó quién eras.

Harry suspiró entre un gimoteo, cerrando sus ojos un instante.

—Te juro que intento pensar claro, ser una persona madura y sensata, p-pero...—hipó—. Desde que la vi frente a ti y asimilé quién era..., no dejo de imaginar tus labios en su cuello, en su boca..., y-y no lo soporto, me da náuseas solo pensarlo—volvió a mirarlo mientras Louis lo sujetaba de la cintura, acercándolo dulce y firme a su cuerpo. Harry colocó sus manos en el rostro ajeno—. Te quiero solo para mí. Te quiero. Te amo. Te adoro.

—A mí también me provoca náuseas imaginarte con alguien más—esbozó una sonrisa débil—. No puedo borrar el pasado por más que quisiera, y sé por qué te aterra esta situación, pero no iré a ninguna parte, ¿me escuchas? Esta vez no. Pasaré el resto de mi vida demostrándote que eres todo lo que quiero, lucharé por ti como debí hacerlo antes, te recordaré cada día que no hay una persona tan asombrosa como tú en este maldito mundo.

—Ella es la madre de tu hija, nunca podría competir con eso—susurró.

—Tú eres la madre de mi hija—corrigió—. Lexi te llamó mamá, estabas ahí, lo viste.

Back To August (Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora