Cuarta Parte

15 2 2
                                    

A la mañana siguiente comienzo a despertar con pereza estirándome mientras bostezo, intento asimilar donde estoy abriendo los ojos, hay veces que duermo tan profundo que siento como si de nuevo estuviera durmiendo en mi cuarto, en mi casa con mi familia, sobre todo cuando logro dormir comodo, anoche fue de esas veces, incluso soñe que abrazaba a mi oso de peluche...

Me siento rápidamente en el piso y paso una mano por mi cabello completamente esponjado y despeinado, volteo a ver al hombre a mi con timidez, esta acostado, mirandome con las manos en su nuca y una tranquilidad envidiable.

—¿pasaste una noche comoda?—

Lo miro entrecerrando los ojos, no puedo molestarme con él realmente, al final del día por el pude dormir unas horas comodo y calientito, pero por otro lado siento como si se hubiera aprovechado de la situacion. Veo que se sienta a mi lado y estira su mano tocando mi cabello como si fuera un animal, le quito la mano con fastidio y lo escucho reírse suavemente.

—ni siquiera hare el intento de acomodar tu cabello, pareces un pequeño león blanco—

No lo mencione ¿cierto?, tengo el cabello jodidamente raro, es blanquecino con mechones marron
—no me toques Alek, no me agrada el contacto físico—
No soy una persona matutina, detesto despertar temprano y se ve que recien esta amaneciendo, odio las mañanas y a la gente que despierta con energía; me levanto sacudiendo un poco mi ropa, veo al gigante a mi lado levantarse tambien mientras toma sus cosas alistandose para seguir el camino, gruño bajito intentando no pensar en el dolor de pies que tengo por la ardua caminata de el día anterior, ademas de correr como estupido por quien sabe cuanto tiempo, estuvimos caminando todo el dia y solo nos detuvimos una vez; pero no me gusta quejarme, me da pena que vea que aparte de no tener sentido de orientación me quejo de dolores bobos, idiota si, debil jamás.

Tendre en cuenta que no te agrada eso—

Asiento caminando detras
—¿no te pondras tu mascara?—
noto que me mira de reojo y se limita a negar con la cabeza

—ya no te tengo desconfianza—

es lo ultimo que hablamos durante las siguientes horas; pasado lo que debe ser el medio día luego de caminar sin descanso me detengo sentandome en una roca completamente agotado y sudado, paso las manos por mi cabello ya menos enmarañado y suspiro ignorando a el gran idiota que se acerca a mi.

—¿estás bien?—

Rio sin gracia bajando la cabeza, en algun momento del ajetreo de hace un dia creo que me lastime el jodido tobillo pero pense que el caminar pretendiendo que no molestaba lo arreglaría como usualmente hago con absolutamente todos los golpes que e recibido, mi lema es si no me curo me muero y los dos son premios
—me duele un poco el tobillo, pero no es nada, solo dame 10 minutos de descanso y estare como nuevo—

Lo veo dudar y se hinca frente a mi con mirada seria pero también parece ¿Amable? Paso la mirada de su rostro a sus manos viendo como me quita los zapatos y los calcetines dejando ver mi pie izquierdo con el tobillo hinchado y amoratado, sonrio apenado cuando Alek me voltea a ver mientras alza una ceja y levanta mi pie lastimado a la altura de su pecho

esto no se ve como algo que duele solo un poco, ¿desdé hace cuanto te duele?—

—Desde hoy en la mañana, ayer solo sentía molestia y no estaba hinchado... pero aun puedo seguir caminando, no quiero quitarnos mas tiempo—
Lo veo negar con la cabeza mientras toca con delicadeza mi tobillo revisándolo.

tengo que deshacerte el nudo que tienes en el tendón cachorro, va a doler, se un buen chico y aguanta un poco—

Me remuevo un poco incomodo con la situación, no estoy acostumbrado a que me hablen así, ¿a este que mosco le pico?;  asiento observándolo, tal vez este buscando algo de mi, aun queda la pequeña posibilidad de que sea un psicopata...
—¿porque eres tan ambale? ¿Esperas conseguir algo de mi? No tengo nada que pueda darte—
Hablo rapidamente con curiosidad por fin soltando un par de preguntas que llevo tiempo haciéndome.

BLOOMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora