Capitulo 2: Enredados.

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Choi Heesung se formó en una familia repleta de cazadores, creció siendo consciente de la existencia de los licántropos junto a su jerarquía social, siempre supo de su existencia y que estos se encontraban entre los humanos, mezclándose. Fue envuelto en la parte sobrenatural del mundo, entrenado y forjado para darles caza cuando fuera necesario, siempre siguiendo con el código que la organización de los cazadores tenía impuesta.

Los cazadores siempre habían hecho alarde de los código y principios que los regían, siendo estos lo que los diferenciaban de los lobos. No mataban por matar como estos lo hacían, tenían políticas para atacarlos, un código inquebrantable que no podían romper por más que le desagradan los lobos, romper está ética significaba ser iguales a ellos, y por lo tanto, no te hacía digno de ser llamado cazador. Toda su vida siguió las reglas autoimpuestas por su organización, convirtiéndose en uno de los mejores cazadores, superando a las leyendas de antiguas generaciones.

Heesung siempre siguió el código al pie de la letra y no pensaba romperlo.

Cuando apareció Kim Dan, este le había hecho temblar cada fibra de su piel haciéndola arder. La atracción mordaz que se instaló en su pecho la primera vez que lo observó fue anormal y poco convencional al punto de pensar que había sido víctima de alguna clase de brujería, su cuerpo quemaba al ver a ese hombre de cabellos castaños que con amabilidad ayudaba a los demás, su sonrisa reluciente y la suavidad del toque de seda de sus manos cuando atendía a los demás era mortífera.

Le gustaba, debía admitirlo. Sim embargo, su gusto fue puesto en duda al saber una irónica realidad, no tardó en ser informado de que ese bonito chico ahora era parte de la manada de Jaekyung.

Kim Dan era un asqueroso licántropo.

Jaekyung tenía un acuerdo con su organización, su deber era mantener a su gente controlada y dentro de su territorio, siguiendo las normas y lineamientos impuestos por los cazadores, manteniendo el territorio neutral y sin disturbios, este siendo seguro tanto para humanos como para licántropos, así evitando el riesgo de morir con su manada a manos de los cazadores. Una de estas reglas era dar aviso a la organización por cada miembro vetado y admitido en su manada junto a las razones, fue el mismísimo Joo Jaekyung, líder y alfa de la manada Team Black quien fue a las instalaciones de su organización para entregar la carpeta con los datos de su reciente miembro admitido y dar el aviso personalmente.

No era ningún idiota, Jaekyung nunca iba a las instalaciones, los informes siempre eran llevados por su consejero Park Namwook, la administración lo conocía más a él que al mismo Jaekyung, este solo se presentaba en situaciones demasiado delicadas que requirieran su principal atención o de ser en algún punto extraño, de su interés.

El interés marcado de Jaekyung en ese lobo de categoría omega fue expuesta y observada por todos, su presencia ahí lo delataba.

Su desilusión fue enorme, Kim Dan tenía todo para ser un audaz cazador, su valentía y sus principios era inigualables, era perfecto para ser uno de los suyos ¿Cómo alguien tan puro podía ser un licántropo asqueroso? Heesung tuvo que replantearse muchas cosas en ese momento, porque su atracción inicial hacia Kim Dan lo hizo involucrarse demasiado con los lobos, metiéndose en problema más de una vez.

Problemas que desencadenaron eventos que solo quería olvidar.

"—¡Suéltenme! Mgh... Ah, por favor"

Hessung negó con su cabeza, los recuerdos de esa noche seguían perturbando a su mente, los retazos inconexos de ese día hacían estragos en él. La voz aguda pidiendo ayuda, mientras su cuerpo era ultrajado por diversos alfas queriendo divertirse con su cuerpo, desgarrando sus ropas y listos para tomar aquel cuerpo que forcejeaba y pedía a gritos ser salvado.

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⏰ Última actualización: Sep 30, 2023 ⏰

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Luna de Sangre / JaeDan OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora