Es más profundo que antes, cuando lo hacían su boca y sus dedos, y me envuelven oleadas de placer. Es algo a lo que podría acostumbrarme fácilmente, y ya estoy pensando en la próxima vez.
—Joder, sigues robándomelo. — Se retira y, como si no pudiera evitarlo, se apresura a volver a penetrarme. —Este coño me está dejando seco.
Ahí es cuando siento un calor adentro mientras su hombría palpita. Es algo primitivo, y mi instinto es apretarme alrededor de él y profundizar. Su semilla se ha esparcido y me aferro a cada gota para que eche raíces.
—Date la vuelta, tengo uno más. — gruñe mientras empuja mi espalda y empuja mi cadera.
Hago lo que el tío Amos quiere y ruedo sobre mi espalda. Me duele un poco entre las piernas, pero sé que tengo que cumplir con mi deber. Me tira de la parte delantera del vestido, así que lo desato mientras me penetra.
Esta vez no va despacio, sino que golpea fuerte y rápido. En cuanto me desato la parte delantera del vestido y mis pechos quedan libres, veo que estoy goteando y llena.
—Haces más para seguirme el ritmo. — dice mientras agacha la cabeza y se agarra para amamantar. En cuanto ha amamantado un poco, pasa al siguiente. —Sí, esto es para mí. Esta leche me mantendrá alimentado.
Le paso los dedos por el pelo mientras bebe hasta saciarse y se corre dentro de mí. La sensación es tan buena así, que no lucho contra mi cuerpo cuando se acerca el clímax. Levanto las caderas y aprieto con fuerza mientras el placer se dispara y luego me inunda.
El tío Amos vuelve a beber y veo que le cae leche por la barbilla. No se la limpia mientras empuja con fuerza una última vez, y siento su cálida descarga exactamente donde más la deseo. Esta vez, lo rodeo con las piernas para que no pueda salirse antes de tiempo. Una de las esposas me dijo que esto ayudaría a que la semilla echara raíces.
—Codiciosa. — se burla el tío Amos mientras me sonríe. Luego se inclina para lamerme los pezones una vez más. —Supongo que yo también lo soy.
—Te agradezco mucho que me hayas dejado venir a vivir contigo. — le digo y le beso los labios.
—Yo también, corderita. Sabes que te amo, ¿verdad? — dice, y asiento.
—Yo también te amo. — le respondo y me abrazo a él. Esta vez me besa despacio y noto lo duro que está. — ¿Debería hacer mis quehaceres una vez más?
— ¿Por qué no entras y me preparas algo de comer? Dejaré que te llenes antes de volver a ponerte sobre mi polla. — Me frota el pezón con el pulgar y mis pechos se sienten pesados por la necesidad. —Ahora quiero leche con todas mis comidas.
—Sí, tío Amos. — digo y me río mientras se sale y me ayuda a ponerme de pie en el heno.
—Buena chica, corderita. — dice mientras se abrocha el overol. —Pronto iré por mi bebida.
✨✨✨✨
Gracias por llegar hasta aquí, si bien especifico los libros que subo NO son míos, yo me encargo de traducirlos para ustedes...
Seguiré subiendo libros pero ahora un poco mas largos y espero que lo disfruten!
✨🙌✨
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Leche para mi tío de Ar Taboo +18
Teen FictionGanarse el sustento va a ser más fácil de lo que pensaba.